Algo Contigo (KaiSoo &a SeSoo)

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—Tienen que venir aquí —ordenó.

—Pero aún no terminamos de recorrer lo que nos pediste, no llevamos ni la mitad de la ciudad y hemos rastreado en el sistema de habitantes —se quejó la voz del otro lado.

—Él está aquí, sin querer me lo tope... necesitan venir a Crail lo más rápido que puedan... yo lo he visto y anda viviendo por aquí —empezó a decir con desesperación.

—JongIn, creo que debes parar... Esto te está volviendo loco... —la voz del otro lado de sugirió.

—Maldita sea ustedes no saben nada, vengan a Crail que para eso les pago y si quieren les doy lo doble de lo que perciben pero los quiero aquí lo más antes posible —grito JongIn mientras colgaba con fuerza aquel teléfono del hotel donde estaba.

Él no estaba loco y estaba seguro de eso. Había visto a KyungSoo y a ese par de niños que podían ser sus hijos, tenía muchas dudas y no entendía que hacían esos grandulones custodiándolo. Nadie había sabido nada de KyungSoo y era como si la tierra se lo hubiese tragado, ni siquiera su Padre el cual no había visto después que le pusiera una demanda por secuestró, su suegro realmente lo odiaba tanto como su abuela la cual no había visto desde que se leyó el testamento de su abuelo.

🌾🌾~

Al siguiente día no había mercado y la brisa marina lo volvió a golpear en la cara con toda la frescura de la tarde. Recorrió las calles y las tiendas en espera de ver aquel hermosos rostros que tanto añoro por muchos años.

Y así pasó otro día.

Y otro día.

Y otro...

No lo volvió a ver ni siquiera en el siguiente día del mercado, JongIn tenía que regresar a Corea por asuntos de negocios pero antes de que se fuera dejo a la gente que había contratado para buscar a KyungSoo por todo Crail y alrededores. Nadie podía descansar hasta que cada zona hubiese sido rastreada.

🦄🦄

Un mes después

—JongIn tienes que entender que él no está ahí... ¿Por qué me haces esto? —Jessica se dejó caer en el sofá.

—JongIn, será mejor que planeemos la fecha de la boda —SooJung dijo mientras arrullaba al bebé en sus brazos.

El aludido no les estaba prestando mucho atención ya que estaba leyendo un par de correros en la laptop que sostenía en sus piernas.

—Me estás haciendo caso? —su madre exclamó con enojo.

—JongIn —Soojung lo secundó.

—¿Cómo? —el mencionado alzó el rostro y vio a ambas mujeres mirándolo expectante.

—Habló de la boda, debemos planificar la boda. El bebé ya cumple un mes pronto y mis Papas quieren saber cuando nos vamos a casar.

—SooJung, no tengo tiempo para esto —respondió JongIn aquello y comenzó a teclear en su laptop.

—Eres un insensato —lo regalo Jessica—. SooJung quién se ha ofrecido a darte la felicidad que tanto bis hace falta y tú hijo...

—Basta —gritó JongIn haciendo resonar toda la estancia. La ama de llaves, Minha aplaudió internarme ante aquello—. No es mi hijo y no de porque SooJung te empeñas en esto... No pasó nada entre nosotros aquella vez y eso tu mejor que nadie lo sabe.

—Pero si es tu hijo —ella dijo con nerviosismo.

—No lo es y ya deja de mentir por favor que tengo tantas cosas en la cabeza y no tengo tiempo de esto... Solo vete y busca al padre de tu hijo que no soy yo.

Aquella mujer tomo sus cosas y salió de la casa mientras su hijo no dejaba de llorar.

—¿Pero que haz hecho JongIn? No te eduqué de esa manera.

—Por supuesto que no, me educaste de la peor manera, pero no soy un estupido y ese niño no es mío.

—Estás tan aferrado a KyungSoo que no sabes lo que dices.

—Yo creo en lo que veo y vi a KyungSoo aún que creas todo lo contrario.

—Estás quedando loco y no sabes lo que dices... no quiero aún loco por hijo...

El teléfono en el bolsillo de JongIn sonó haciendo callar a su madre.

—Diga.

—JongIn, lo hemos encontrado... ya sabemos donde vive KyungSoo.

—¿Qué? —preguntó mientras se ponía de pie, no le importó que su laptop se cayera al suelo resonado.

—Lo hemos localizado JongIn, tenías razón, KyungSoo está vivo.

~

Recordaba Crail como un sueño y tuvo mucha felicidad desde el instante que el taxi lo dejo en aquella casa donde le dieron la dirección, desde ahí de podía ver el mar y las colinas que lo rodeaban de adornaban con flores silvestres. JongIn pago el taxi y miro al tranquilo vecindario, no sabia por donde buscar ya que casi todas las casas eran iguales, salidas de un cuento de la Edad Media.

Camino por las calle y de deleitó con cada una de las casas del vecindario, había un par de ancianos tomando el té afuera de una casa y en la siguiente un par de niños jugando a quién sabe que cosa. Leyó cada uno de los buzones hasta que llegó al final del vecindario.

Una enorme casa con un gran jardín le llamo la atención. Él la vio, a esa niña de colegas que el otro día iba con KyungSoo. Aquella niña de podía ver desde aquel ventanal, estaba mirando hacia afuera y cruzaron miradas.

JongIn camino con paso firme y decidido, quería saber cómo estaba, tenía tantas dudas y solo quería besar a KyungSoo y preguntar por todo lo que le había pasado. Aquel camino de piedras de le había hecho una eternidad que no tenía fin.

«¿Como haz estado?», quizás sería lo primero que preguntaría. «¿Por qué nunca me buscaste?» «¿Por qué huiste de mi?», tantas cosas que preguntar y aún no sabía por dónde empezar.

Cuando toco la puerta las lagrimas estaba amenazando con salir y no puedo evitar casi llorar cuando escucho unos pasos acercar, por ello detectó que el piso del otro lado era de madera ya que podía escuchar crujir con cada pisada.

Lo qué pasó hizo que se helara la sangre por la sorpresa que halló del otro lado de la puerta. Pasó de felicidad a rabia o frustración, la persona del otro lado lo miraba con sorpresa que su color de su cara de había puesto pálido.

—¿Qué haces aquí? —su abuela le preguntó con tal sorpresa.

—Es lo mismo que yo me pregunto —JongIn tenso los músculos del rostro.

Su abuela había sabido lo desesperado que estuvo buscando a KyungSoo por todos lados y ella siempre supo dónde estaba. JongIn se sentía frustrado y con un enorme nudo en el estomago.

—Yo, yo —su abuela tartamudeo—. Será mejor que te...

—¿Quién es? —aquella voz JongIn la tenía grabada en su mente y alma.

Alejo la vista de su abuela y miro a lo que tanto había ansiado por estos años, KyungSoo estaba en todo su esplendor y belleza frente a él mirándolo como si nunca lo hubiera visto en su vida.

—Yo soy JongIn tu...