Capítulo 5

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Karen

Seis y media de la mañana sonó mi alarma y salté de la cama prácticamente.

-Landon...- Lo acaricié suavemente, pero este no se despertaba- ¡Landon!- Grité y este se levantó agitado.

-Me vas a matar de un infarto mujer- Protestó él- ¿Qué hora es?

-Seis y media- Contesté mientras me colocaba mi ropa interior- Es hora de que vayas yendo.

Landon protestó en voz baja y se levantó de la cama para vestirse. Él fue una de las primeras personas que conocí cuando llegué a Londres un año atrás. Comenzamos siendo muy buenos amigos pero luego nuestra relación se tornó sexual y pasamos a ser "amigos con derechos".

Mientras comía cereales sentada encima de la mesa, Landon se acercó a mi y se colocó entre mis piernas.

-¿Me das mi beso de despedida?- Murmuró cerca de mis labios.

Acerqué mi boca la suya y cuando nuestros labios estuvieron a punto de chocarse, corrí mi rostro.

-Es hora de irte, Landon- Murmuré en su oído de forma seductora.

Landon sonrió y se alejó de mi- ¿Te parece si nos encontramos hoy en la noche para trabajar en el caso?

-Depende...- Tomé un mechón de mi cabello y comencé a jugar con él-¿ Nos vamos a juntar a trabajar en el caso o vamos a tener sexo, otra vez?

-Podemos hacer ambas cosas- Acarició mi pierna desnuda- Si estas de acuerdo, por su puesto.

-Creo que debería empezar a hacer la difícil contigo- Pasé mis manos por su torso desnudo- Te doy todo muy fácil, Landon. A puesto a que ninguna chica te da todo tan rápido como yo.

-Espero que sea una broma- Largó una carcajada- Hace casi más de un año que nos acostamos regularmente. Creo que he visto tu vagina más de lo que he visto mi pene.

A mi sinceramente no me gustaba ser tan fácil con un chico. Era divertido hacerme la difícil por un tiempo con alguien. Pero Landon era la excepción. Al haber sido amigos por un par de meses, yo ya tenia suficiente confianza como para hacerme la difícil un rato. Además, amaba tener sexo con él, nos entendíamos perfectamente y era sin compromisos y sentimientos.

-Contigo no puedo hacerme la difícil- Atraje su cuerpo al mío y lo besé apasionadamente.

(...)

Mi vida en Londres era bastante movida. Lunes, miércoles y viernes durante la mañana cursaba mi especialización en finanzas, ya que un año atrás me había recibido de Directora de Negocios Globales. Luego, durante la tarde hacia mis practicas en una empresa automotriz . Los martes y jueves trabajaba todo el día en un Sephora, ya que el maquillaje era una de mis pasiones y uno de mis sueños frustrados era tener mi propio estudio de maquillaje y mi propia marca.

Yo había nacido en Buenos Aires, Argentina y cuando entré a cursar el último año de mi carrera, me salió la oportunidad de cursarlo en Londres y obviamente acepté. Dejar a toda mi familia, no fue algo fácil, yo era muy unida a ellos, pero vivir en otro país era uno de mis mayores sueños, así que tuve que hacerlo.

Al terminar mi carrera, me ofrecieron hacer la especialización en finanzas en Londres y gracias a mis notas, tenia la mitad de los estudios pagos, es decir, tenia media beca. Con el dinero que me mandaban mis padres y el dinero que proporcionaba mi trabajo en Sephora, podía costear mis estudios y pagar la renta de mi departamento.

Como era lunes, me tocaba ir a la Universidad.En las clases yo era de esas que pasan desapercibidas y que los profesores ni saben que existen. No es que fuera tímida, sino que simplemente no me gustaba participar o discutir en clase. Prefería quedarme callada y prestar atención.

Yo de verdad disfrutaba ir a clases, amaba lo que estudiaba y además me costaba mucho esfuerzo pagar esas clases, al igual que a mi familia.

En la Universidad solamente era cercana a dos personas...a Lindsay, quien se había convertido en una muy buena amiga y , por su puesto, a Landon. Lindsay era estudiante de economía y Landon era estudiante de abogacía.

Mi día en la Universidad transcurrió normalmente, nada fuera de la normal. Cuando se hicieron las dos de la tarde, me tomé un taxi para irme a la agencia automotriz a realizar mis practicas. Esta era mi parte favorita del día, ya que era mi oportunidad de poner a prueba todo lo que había aprendido en clase, aunque no me pagaran.

En la agencia me dedicaba a ayudar al gerente de finanzas cuando se hacían compras de autos al exterior o cuando necesitábamos traer repuestos del exterior.

-Louis...¿me haces un favor muy grande?- Yo ya tenia confianza con mi jefe, como para hablerle de esa manera.

-¿Qué quieres, Karen?- Él se encontraba en su escritorio redactando los permisos para la aduana.

-¿Me prestas el Camaro amarillo por hoy?- Hablé rapidamente y sonreí.

-¡¿Qué?!- Cuestionó- Ese auto hay que entregárselo a Max Lafôret la semana que viene. Él es uno de los mayores clientes de esta agencia, estas loca si piensas que te voy a prestar ese auto.

-Por favor, por favor- Me arrodillé en el piso y junte mis manos- Tengo una cita muy importante hoy, por favor. Además, conduzco desde los diecisiete años, te prometo que no lo voy a chocar.

- Esta bien- Dijo resignado- Las llaves están en el depósito.

-¡Gracias!- Me levanté del piso y lo abracé- ¡Eres el mejor jefe del mundo!

-Si el auto llega a tener aunque sea una pequeña ralladura, te mato - Dijo riendo.

-Eso no pasará- Tomé mi bolso, dispuesta a irme a buscar el Camaro.

-Karen...- Louis me detuvo antes de que me fuera- Tendrás que tener una cita con mi hijo a cambio.

-Si, si- Contesté- No hay problema.

Me fui de la agencia en el Camaro amarillo a buscar a Theo. Nose que tenia ese chico de especial, quizás era su inocencia o su inexperiencia lo que me atraía, no estaba muy segura. Pero ese chico con hermosos ojos azules con tan solo diecisiete años, me traía loca.

Enseñándole a Theo  #WOWAwards2k17 #EmpawardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora