Corazón ciego || Matthew espinosa

Capitulo 1 - 2/2

Llegue a casa golpeando la puerta desenfrenadamente, había perdido mis llaves hace un mes y no me darían otras hasta que entrará a la escuela, intentaba hacer más ruido del necesario para que me dieran unas antes

–Deja de tocar como si alguien estuviera a punto de matarte – dijo mi mamá mientras me abría la puerta y me saludaba con un beso en la mejilla –me asustas

–Perdón – dije sin sentirlo realmente y pasando por su lado – sabes , en media hora tengo una entrevista de trabajo

– Eso es realmente maravilloso, ¿de que es el puesto?

–¿puesto? No trabajaré como secretaria si a eso te refieres – le grité mientras subía las escaleras hacia mi cuarto y cerraba la puerta tras de mí

–¿entonces? – preguntó ella mientras caminaba a la cocina

Abrí la puerta asome mi cabeza y grité

–Voy a ser niñera

••••••

Maneje sin prisa hacía Davis St en mi Mushtang Shelby del 67 , vestía unos vaqueros grises y un cardigan negro que mamá me había regalado en navidad, dure 20 minutos en llegar y cuando vi la enorme casa estuve apunto de caerme , tenía proporciones inmensas , era la más enorme del vecindario, había plantas y una fuente en él patio

Volví a mirar el papel arrugado en el que había escrito la dirección y me cercioré de que era el lugar correcto, limpie mis sudorosas manos en mis vaqueros y toque el timbre

« debería ir corriendo a casa »

Volví a tocar el timbre

« de repente no hay nadie »

Espere

«bien me iré ¿debería quedarme?»

Decidí que no valía la pena, moría de nervios así que di media vuelta y camine hacia el coche, tenía las llaves sobre la minilla cuando gritaron mi nombre, me giré

La señora Laura caminaba rápidamente hacia mi , tenía piel blanca y cabello recogido en una coleta, vestía un traje rojo que mamá solo podía soñar que compraba y sus zapatillas eran más caras que todo mi guardarropa, trague duro y me arrepentí de haber venido tan informal y desee traer un vestido elegante, tal vez así no parecía tan vaga, debí irme cuando pude

–_____ ¿podrías venir aquí ? Me es imposible caminar por el césped en tacones – dijo la señora Laura con una sonrisa en el rostro aunque sus ojos expresaban una tristeza inmensa

– ho-hola señora Laura – dije mientras extendía mi mano devolviéndole el saludo

– llámame Laura  –me dijo y me invitó a pasar a su casa con un gesto con la mano

– está bien señora Laura

Me miró alzando la ceja

–disculpa, Laura –dije avergonzada mientras metía las palmas de mis manos en los bolsillos delanteros de mis vaqueros – así que ¿cuando empiezo?

–primero témenos que discutir algo –dijo Laura  movimiento sus manos con nerviosismo – acompáñame a la biblioteca

La seguí a través de la enorme casa, camino aquí y allá conmigo atrás, hasta que se paró en un salón donde había un escrito de madera inmenso y estantes llenos de libros que seguro nunca se leían, me senté frente a ella y empezó

– seguramente te preguntarás porqué nadie aceptó el trabajo con tan buen salario ¿verdad? -dijo Laura  mientras me miraba fijamente, yo asentí – bueno primero quiero decirte que me parece maravilloso que estés aquí y que si al final no quieres quedarte está bien

¿Acaso tenía de hijos a unos demonios o que? No podía ser tan malo valdría la pena por Princeton

– no importa yo quiero el trabajo sus hijos estarán en buenas manos, tengo experiencia con mis primos pequeños y se con cuáles historias se quedan dormidos.....

–ese es uno de los problemas, verás ____, no quiero que cuides a ningún niño pequeño, quiero que cuides a mi hijo de diecinueve años

–¿eh?

Es decir ¿que? ¿Realmente su hijo de diecinueve años no podía cuidarse sólo? ¡Es dos años mayor que yo!

–sé que es extraño pero mi pequeño Matthew no puede cuidarse por sí mismo él perdió la vista hace dos meses y desde entonces se ha negado a salir de esta casa , tal vez tú podrías ayudarlo, eres de su edad ¿no?

–soy menor que el - caí en cuenta de lo que decía –¡no puedo! ¡Es demasiada responsabilidad!– le dije aterrorizada con la idea de cuidar a alguien mayor que yo – probablemente si le leyera " Blanca Nieves " me sacaría a patadas de su cuarto

– ¡te pagaré doble! – dijo Laura  mientras se ponía de pie y hacía una mueca extraña con la boca – por favor, confió en que podrás, si no soportas una semana podrás ir, pero por favor solo inténtalo

La mire frunciendo el ceño y mordiendo mi labio inferior con fuerza y al final cedí

–esta bien , cuidaré a su hijo

« aunque sea mayor »