-- Isabella dale muévete!!! Eres lenta -- Sun-Hi corría unos metros más adelante de mi
-- sabes muy bien que odio hacer jogging -- sentía que mis pulmones no tenían más aire y que mi corazon iba a explotar, mis piernas pedían piedad -- ya basta!!!-- me tiré al suelo completamente sin fuerza.
-- no te puedes rendir -- se acercó tratando de levantarme però era un peso muerto
-- llama una ambulancia -- dije delirando -- creo que moriré aquí en este instante --
-- que exagerada!! -- se agachó -- tenemos sólo 30 minutos corriendo -- se rió
Cada vez que sonreía mi corazón se aceleraba, al ver esa sonrisa su recuerdo regresaba a mi mente, era como si volviera a ver su rostro dibujado en esa sonrisa.
Habian pasado exactamente 360 días desde su partida y 330 días que esa chica loca había entrado en mi vida.
Al contrario de Jungkook ella era un pequeño terremoto, relajosa y simpática siempre lista para hacer alguna locura, amaba hacer deporte como hombre y la mayor parte de las veces me obligaba contra mi voluntad a practicarlo junto a ella.
De cierta manera ella llenaba el vacío que Jungkook había dejado, algunas veces me perdía mirando sus lineamientos, iguales a los de él, era como si volviera a ver a Jungkook atravéz de ella.Sun-Hi era muy parecida a él y no sólo físicamente sino aún caracterialmente, era dulce, amable y completamente sincera en todo, en poco tiempo tal como su hermano se ganó mi cariño y mi corazón, éramos inseparables.
-- uno de estos días moriré enserio por tu culpa!! -- me quejé mientras me cargaba en su espalda ya que estaba muy cansada para caminar
-- si no fuera por mi, ahora serias una pelota! con todo lo que comes deberías estar rodando -- le peñisque un cachete por decir eso
-- en la comida está el vivir -- contesté
-- con lo que comes podrías llegar a ser inmortal -- quería responderle però su comentario me causó mucha gracia que no pude contener la risa.
{...}
-- ya levantate -- Sun-hi continuaba a moverme tratando de despertarme
-- no quiero!!! -- me cubrí con sus sábanas que olían a fresa -- déjame dormir otro ratito -- le supliqué
-- es siempre la misma historia contigo!! -- alzo la voz -- vienes a mi casa para poder dormir un poco mas ya que es más cerca del colegio però terminamos siempre llegando tarde por tu culpa -- miré de reojo su rostro para ver si estaba enojada y la vi al pié de la cama cruzada de brazos con ya puesto el uniforme del colegio, maquillada y peinada, al que deduci que enserio ya era tarde
-- perdón mamá -- dije sentandome en la cama con la mirada baja
-- tienes 10 minutos para prepararte -- dijo toda seria dándome la espalda, unos segundos después volteó -- si te apuras logras comer un pedazo de torta de cocholate que hice esta mañana -- al escuchar "torta de chocolate" en menos de 4 minutos me vestí me lavé y sin nisiquiera peinarme corrí a la cocina para degustar esa maravillosa torta
-- Dios bendiga la torta de chocolate -- dije con media torta ya en la boca
-- es increíble como cada vez que escuchas comida corras inmediatamente -- me miraba con disgusto
-- sabes que te quiero -- le sonreí
-- lo se pero muévete! !--
Al entrar a clases como de costumbre los chicos se desnucaban para ver a Sun-hi, desde su llegada no había chico que no estuviera enamorado de ella y era comprensible ella era perfecta!
Bella, inteligente, amable y educada no tenía defectos, a su lado me sentía como si fuéramos ella la bella y yo la bestia, però no sentía para nada envidia al contrario me alegraba que ella fuera querida y apreciada por los demás, la cuidaba como si fuera algo frágil al cual nadie debía lastimar aunque si ella no lo nesecitaba, sabía escoger muy bien sus amistades.-- me acompañas a comprar un vestido? -- me hizo los ojitos de gato para convencerme
-- Sun-hi tu te demoras un siglo para escoger un vestido -- me quejé -- Porqué no vas con uno de tus admiradores ? estoy segura que estarían encantados de pasar horas viéndote probar un sin numero de vestidos --
-- però yo quiero ir contigo -- hizo puchero, esa imagen me derretía cada vez el corazón, sabía muy bien como convencerme
-- te odio lo sabes !-- le dije al rendirme a sus encantos
-- si lo se -- me abrazó emocionada por haber obtenido lo que quería
Como me esperaba pasamos como mas de 4 horas dando vuelta por negocios para que despues elija el vestido que vio en el primer negocio que fuimos
Tenía los pié destrozados y estaba enojada
-- Tuti no te enojes -- tuti era el apodo que me había puesto y que usaba cada vez que quería ser perdonada
-- no me llames así que está vez no te perdono --
-- y si te compro un helado? --
-- asi las cosas cambian -- la abracé y ella se rió
Se habían hecho casi las 10 de la noche y estábamos regresando a casa, dejé a Sun-hi en su casa y proseguí hacia la mía, caminaba por una calle desolada que solía recorrer però esa noche algo dentro de mi me inquietaba, tenía un poco de temor, así que comencé a mirar por todos lados però no había nadie. Seguí caminando hasta que derrepente frente de mi se paró un chico que pareció salir de la oscuridad , tenía una botella de cerveza en su mano izquierda, no le presté atención y avancé
-- adónde vas bebé -- me detuvo del brazo -- quieres ir a beber un trago conmigo? -- estaba totalmente borracho
-- no gracias -- le dije tratando de soltarme de su agarre però el me apretaba fuerte
-- no te hagas la preciosa conmigo -- trató de acercarse a mi rostro y de instinto le di una cachetada, ese gesto hizo que sus ojos se llenaran de rabia, en ese istante tuve miedo y sentí una voz en mi cabeza gritar
"Corre"
Hize caso a esa voz y comencé a correr sin mirar atraz, sentía los gritos de ese chico que me perseguían
" voltea a la izquierda " otra vez esa voz que me guiaba
" voltea a la derecha y escondete detrás de esa pared y quédate ahí sin moverte"
Sin entender yo misma seguí esas indicaciones y después de un par de minutos que me quedé ahí salí y vi que ese borracho ya se habia ido.
De quien era esa voz?
Primer capítulo!!!
Espero aprecien esta segunda temporada
Como lo hicieron con la primera
😘
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Mi Ángel Guardián
FanficDicen que para cada ser humano ahí un ángel guardián que lo protege. había pasado un año desde su partida y el vivía sólo en mis recuerdos pero algo estaba cambiando.. a cada lugar que iba, dondequiera que estuviera sentía su presencia cerca de mi...