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Comienzo a sentir los rayos del sol colandose por mi ventana y hace que mis ojos se abran lentamente, mis cabellos desordenados me hacen molestar y me siento finalmente recogiendomelo con una cola, me levanto rapidamente recordando mis deberes del dia de hoy, mi padre, el mayor oficial de policia de este pequeño pueblo me esta esperando para mi primera leccion de entrenamiento, al igual que mi hermano, el quiere que su hija menor se convierta en oficial, tampoco dire que es un sufrimiento el hecho de convertirme en policia, pero se me daria bien intentar pensar en algo mas que hacer con mi vida

-- Sam, baja -- escucho gritar a mi mamá y bajo rapidamente para ver que necesita

Mi padre, el mejor hombre del mundo, finalmente se dejo llevar por su cargo y poder, hace ya unos años que recuerdo, engaño a mi madre, ella habia decidido separarse, pero finalmente despues de ver sus pocas opciones para seguir adelante, decidio perdonarlo, sabiendo que en estos años la han engañado mas veces de la que pueda contar. Mi madre tiene ojos claros y cabello negro ondulado, al igual que el mio, pero para mi maldicion tengo la misma personalidad de mi lado paterno

-- ¿emocionada? -- pregunta mamá mientras me como mi desayuno

-- bastante-- dije en tono ironico, aunque creo que ella no lo noto

--hija, se que es algo duro para ti toda esta situacion, incluso para mi lo es--suspira y me mira a los ojos, luego de dare un fraternal beso en la cabeza, sonrie-- debes irte ya, tu padre te estara esperando

mire a mi madre con algo de lastima quiza, posterior a eso solo me levante para tomar mi camino, mi padre me habia visto lanzar dardos con mis amigos una vez que salimos juntos como la familia unida que somos, y me casi dicto que debia ir con el a practicar con cuchillos, mi supesto potencial de policia me llevo al aburrimiento completo, asi que vengo aqui con los brazos rigidos

--querida ¿como estas?, hace mucho no te veia--dijo mi padre con su sonrisa inocente y su traje azul

--bien, si vinieras mas seguido--dije en tono sarcastico

la practica fue mas entretenida de lo que esperaba, al parecer el supuesto potencial realmente era verdadero, se me daba bien el lanzar cuchillos a los blancos, aunque claro, algunos se caian y no daban siquiera en el punto, pero supongo que ire mejorando, lo unico irritante, fue escuchar a mi detestable padre diciendome cosas como "tu puedes cariño", "wow, mi hija es impresionante".

de camino a casa me encontre con una mujer, llevaba un vestido blanco ajustado y era tan hermosa que incluso me hizo detenerme, lo que capto luego mi atencion era su destino, ya que entro  la estacion de policia con la sonrisa mas encantadora, quizas fue mera curiosidad, o fue e destino el que me llevo alli, o el hecho de poder saber algo que antes no, suongo que siempre he sido muy obstinada y curiosa, en fin.

solo alcance a notar desde la ventana que aquella mujer encantadora no era mas que otra mujer en la lista de mi padre, me molesto, la verdad, el ver como ella ponia las manos de el en su cintura, cuando el reflejo de mi madre dulce, inocente y tierna era torturada por la cruda verdad de no ser valorada por un hombre que no merece ninguna de esas cosas. sorprendida por una patrulla, llega un chico de cabello oscuro, el cual tenia unas esposas y estaba acompañados por dos oficiales mas, por un momento pequeño me miro, su rostro reflejaba una furia intensa, estoy segura que habria querido estrangularme lo habria hecho.

con esos sentimientos me dirigi a mi hogar, con miedo, angustia, y un odio intenso hacia lo que llamaba padre, asi como fue ese dia llegaron los sueños, donde lo unico que hacia era aniquilar a mi padre y a la mujer hermosa que habia visto antes, este sueño me acoso por semanas, hasta tal punto de no querer dormir por miedo a soñar tal barbaridad, siempre me crei una chica de principios, que pensaba que matar era el peor error que una persona pordia cometer para vengarse de algo

zodiaco crepypastaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora