In da Supermarket

1- La pistola Nerf

Bruno's POV

-Piu, piu, piu- voy disparando con mi pistola Nerf a todos lo objetos que se encuentran a mi alrededor, lo que en este momento vendría a ser el espacio exterior. Estoy en la despensa del supermercado, que es el lugar más secreto y recóndito de toda la galaxia.

-Hola Bruno - me saluda Jim pasando de largo con unas cuantas cajas encima.

-Buenos días- dice Valerie entrando a los vestidores.

-Sí, sigo creyendo que es el lugar más recóndito de la galaxia.

-¿Comando Espacial? Comando Espacial responda- habla Jenna por el radio que normalmente usamos para comunicar cuando falta algún alimento, o un niño llorón rompe un frasco de chocolate, hay que resaltar el "normalmente" ya que ahora estamos jugando a Star Trek(1).

-Aquí base- logro responder antes de que una fuerza me tire al suelo.

-Glo,glo,glo. Soy un pavo ranger - dice Milo con un guante de jardinería en la cabeza, una tela de seda roja envolviendo como un burrito mexicano y una espada de Star Wars(2) - ¡Yo soy tu padre!

-No...- empiezo a gritar dramáticamente cuando paro en seco- ¿Eso no es en Star Wars? - pregunto confundido.

-Pero estamos jugando a Star Wars, yo soy Darth Vater y tú eres Luke Skywalker.

-No-o - muevo mi dedo y mi cuello como una diva.- Esto es Star Trek.

-¿No era Apollo 13?- pregunta Jenna desde la pequeña radio.

-¡Los idiotas del fondo! - nos llama el señor Brewer con su cariño habitual; varios empleados se dan vuelta para mirarlo - ¡A ustedes no! ¡Idiota 1! ¡Idiota 2!

Milo y yo nos miramos y nos acercamos a lo que podría ser un osito cariñosito, pero es más amargado que mi madre cuando no bajo el asiento del inodoro y tiene una pistola eléctrica en su cinturón...Todo un encanto.

-¿Y tú quién eres? ¿Emma Watson en un especial de cocina? - Le pregunta Brewer a Milo.

Antes de que Milo pueda responder algo coherente, Brewer gira hacia mi persona- ¿Y qué es eso que tienes en la mano? - Miro mi mano encontrándome con que la pistola seguía ahí, no era como si esperara que se fuera caminando, no, claro que no.

-Oh - me hago el sorprendido mirando la pistola - ¿Cómo llegó esto aquí?

-No te hagas el estúpido...- Antes de que el osito cariñosito no tan cariñosito pueda seguir con lo que iba a decir, la pistola Nerf se dispara sola dándole al jefe en la frente dejándolo inconsciente, automáticamente suelto el pequeño artefacto que yo creía inofensivo.

Imaginándome lo que puede llegar a pasarme cuando despierte suelto un grito afeminado seguido de un salto de princesa voladora y salgo corriendo a toda prisa hasta salir de la despensa seguido de Milo que tiene que levantarse la túnica cada dos por tres para no caerse.
Como alma misericordiosa que soy, levanto a Milo al estilo nupcial y corremos hasta la caja once, alias nuestro lugar de reuniones; ahí están María y Constance. Yo sigo corriendo con Milo agarrándome del cuello como si fuera un mapache con diarrea y yo fuera el único baño en el mundo. Distrayéndome con el pensamiento de un mapache con diarrea no calculo la distancia a la que estamos de la caja y ambos caemos al piso, estratégicamente nos acomodo para que cuando caigamos Milo caiga de cara y yo arriba suyo como la princesa inglesa que soy. Como es normal Milo suelta una sarta de palabrerías en las que no está precisamente diciéndome lo lindo que soy.