Él

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Me desperté demasiado temprano como para ir al colegio, por lo que volví a recostarme en mi cama. Intenté cerrar los ojos y volver a dormir, pero se me da muy mal. Tomé mi cámara del armario, la encendí y comencé a ver fotos para pasar el rato. Rara vez eliminaba las fotos de allí una vez que las guardaba en mi computadora, así que había fotos viejisimas. Me gustaba mirar como las fotos iban mejorando al pasar el tiempo, depositaba un granito más de confianza a mi vida.
Iba casi por la mitad cuando mi alarma comenzó a vibrar. Cerré los ojos y por un momento desee quedarme mirando más fotografías, pero debía levantarme. Hoy habría una exposición en mi curso, y otro colegio asistiría también. Suena un tanto distinto que los demás días, por lo que decido no quedarme durmiendo. Normalmente, eso es lo que desearía todos los días. Hoy, extrañamente no. Quizás las cosas nuevas nos proporcionan adrenalina, ganas de seguir.

Al llegar todo estaba realmente en calma. Es decir, como siempre. Grupos desperdigados por aquí y allá. Las mismas mesas de siempre, las mismas sillas, las mismas personas. Me siento encima de una mesa mientras hablo con mi amiga Allie. Nos conocemos desde pequeñas y es prácticamente parte de mi vida. Irremovible.
Con el pasar de los minutos, todos ocupan su lugar y los espacios vacíos son cada vez menores. El profesor llega y anuncia que los alumnos del otro colegio han llegado. Nos guía hasta la sala común y entramos. Los demás chicos y chicas ya están allí, ocupando sus lugares. Son caras que nunca he visto, y se siente un tanto extraño. Extraño e interesante.
Me siento en el lugar más alejado posible y observo con disimulo. No se me da muy bien entablar conversaciones, prefiero mirar desde lejos.
Me sorprendo al encontrar entre tantas caras nuevas algo que llama mi atención. Mejor dicho, alguien. Lleva la cabeza gacha, no mira a nadie y está en silencio. Alrededor hay una banda de chicos riendo y jugando. Me encogo para evitar que me vean mirando, pero logro acercarme. En un minuto, estoy detrás de ese chico misterioso que sigue sin mediar palabra a nadie.
Salgo de mi mente al escuchar la voz de mi profesor de historia, que está presentando la exposición. Cada grupo debe pasar al frente y mostrar su trabajo. Lamentablemente, debemos decir nuestros nombres en voz alta para que los otros chicos nos conozcan, y viceversa, lo que me hace morir de verguenza, y eso que todavía no ha llegado mi turno.
No miro casi ningún grupo porque mi mente me mantiene ocupada pensando en cualquier cosa, pero si levanto la cabeza cuando el chico misterioso está en el frente. Ahora que veo su rostro, debo admitir que es muy bonito. Lleva el pelo corto pero con pequeños rulos; tiene barba de un par de días y los ojos caídos y cansados, como si no hubiera dormido. Me preocupo por escuchar atentamente su nombre y cuando lo oigo, me obligo a que quede en mi cabeza, como un recordatorio que no debo olvidar.

-Ethan

Luego de un rato, las exposiciones terminan y nos dan un tiempo de descanso. Mientras hablo con mis amigas, no puedo apartar la vista de Ethan.Trato de ser lo menos obvia posible, pero parece tan ensimismado en la nada que no parece darse cuenta de nadie de su alrededor. De pronto aparece una chica, compañera de su curso, y lo abraza. Me da un mal trago, y no entiendo por qué, ni siquiera lo conozco.

Además, me he olvidado de mencionar algo que debería ser importante. Tengo novio. Un novio que ahora mismo me manda mensajes, mensajes que no tengo ánimos de contestar ahora. Guardo el celular en el bolsillo y apoyo mi espalda contra la pared. Esta helada y me da escalofríos, pero no me importa en absoluto. Tengo a alguien en mente, y es justo la persona que no debería ni imaginar.

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⏰ Última actualización: Feb 25, 2017 ⏰

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