El sonrojo del joven de cabellos rosados se notaba a kilómetros. La vergüenza y desconcierto en su rostro se pintaba con una facilidad inquietante para el menor; sus manos temblaban, mientras buscaba la forma de responder a la pregunta del maknae sin quedar en completo y total ridículo.
-Vamos, Jiminnie-ah -habló con sorna el castaño, recibiendo una mirada furiosa por parte del recién nombrado. Ese mocoso jamás lo respetaba y ésta tampoco fue la excepción- No me digas que jamás has sido el que "da" -formuló aquel intento de pregunta, al mismo tiempo que hacía comillas con sus dedos y se le escapaba una sonrisa ladeada. Jimin bufó molesto y respondió, finalmente, de mala gana.
-No. Ahora cállate Jungkook, no todos tenemos la dicha de meter el pipi en la relación... -el maknae arrugó la nariz ante la forma de llamar al aparato masculino. Jimin adoraba ver la frustración en la cara de Jungkook al escuchar dicha palabra.
-Pene, se dice pene.
-Lo que te falta. -sonrió con malicia, mientras el otro bufaba, mas al instante recomponiendo su mirada juguetona y respondiendo de forma irónica.
-Ve y díselo a Tae -pasó la lengua por su labio inferior, viendo el claro disgusto en el rostro de Jimin.
-No porque la hayas metido una vez significa que tengas que presumir, rata inmunda. -Jungkook simplemente rió. Dejando de lado su infantil pelea, el maknae lo miró directamente a los ojos antes de hablar.
-Ya, ahora en serio. Creo que deberías plantearle la idea, digo, sería una vez para probar y capaz termina siendo un muerde almohada de primera...
-Te recuerdo que somos muerde almohadas, Jungkook...
-Sí, sí. Equis. Como te decía... yo creo que incluso Jin ya fue el activo alguna vez en su vida -ambos jóvenes se miraron y, al segundo, comenzaron a reírse de manera exagerada, mientras posaban sus manos en el estómago, en un intento de calmar aquellas estruendosas risas.
Ya cuando finalizaron su sesión de carcajadas, Jimin adoptó una posición seria, pensando que el más joven tenía toda la razón...
Esa misma noche, Yoongi seria suyo.
[Más tarde]
Los besos calmos y suaves que se habían estado dando esa misma tarde, se tornaron en unos mucho más pasionales y eróticos. Las respiraciones erráticas de ambos se oían en toda la habitación y el sonido, producto del roce de anatomías, incluso parecía hacer eco a los oídos de Jimin.
Yoongi, luego de oír el pequeño, pero audible gemido que los sensuales labios de su pareja habían emitido, bajo sus manos hasta el trasero del mismo, manoseando y apretando aquella montaña de carne, mientras Jimin se deshacía en jadeos y gemidos callados por los labios de su hyung.
Ya harto de las prendas que llevaban encima, el pelinegro fue despojando de su camiseta al menor, quien a su vez intentaba torpemente de desabrochar el cinturón de Yoongi.
Al momento en que las cálidas manos de Suga se posaron en su abdomen, Jimin no pudo evitar soltar un gemido, el cual fue la melodía más perfecta que Yoongi pudo haber escuchado.
-Y-Yoongi... Y-ya... no puedo... ¡Ah! -las palabras entrecortadas y los jadeos de Jimin hacían que los besos en el cuello del mismo y las caricias en su cintura aumentarán aun más, excitando a niveles extremos.
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Versatile ➼ YoonMin [OneShot]
Fanfic«Vamos, Jiminnie-ah...No me digas que jamás has sido el que da» Aquellas simples palabras dieron un gran impacto en Jimin. Oh, y también en la parte trasera de Suga.