Midnight

Hi, stranger

- ¡Lena! – Gritó su padre – Se te hará tarde para ir a la escuela
- Ya voy papá – Contestó subiéndose los pantalones

Se terminó de vestir, eran las siete treinta y nueve de la mañana, se le había hecho tarde ya que no había podido dormir muy bien

- Nos veremos al rato papá – Se despidió y salió muy a prisa

Era un Jueves bastante soleado, por eso se había vestido tan primaveral, salió al patio y se subió sobre la mesa viendo hacia el edificio esperando a que Dima saliera, pero se recostó un momento sobre la mesa, tenía mucho sueño

- ¿Muy cansada? – Le preguntaron
- ¡Dima! – Gritó emocionada al chico que estaba delante de ella
- Hola – sonrió
- Me alegra mucho verte – Dijo feliz – Te he extrañado tanto últimamente
- Bueno, mi hermana tuvo un bebé y fuimos a verla a Ucrania – Se encogió de hombros – Perdón por no avisarte, pero no recordaba el número de teléfono de tu casa
- No te preocupes ¿está bien tu hermana y su bebe? – Preguntó Lena emocionada
- Sí, todo bastante bien, creo que le caí muy bien a la niña
- Me alegro – Sonrió y volteo hacia el edificio

Algo en él llamó su atención, una chica estaba hablando con un profesor, traía jeans azul marino, converse negros, una playera blanca y una chaqueta de cuero, las gafas de gota las tenía aun puestas, le llamó la atención en ese momento, ella sólo asentía a lo que le decía el profesor, y sonrió cuando se percató que ella la estaba viendo tan atenta, que había ignorado a Dima

- ¿Qué llamó tanto tu atención? – Le preguntó Dima y volteo a verla
- Bueno, ¿sabes quién es la chica que habla con aquél profesor? – Le sonrió
- Sí, es mayor, su hermano tiene nuestra edad – Contestó Dima encogiéndose de hombros
- ¿Y quién es su hermano? – Preguntó sorprendida
- El de allá –señaló Dima al chico
- ¿Es en serio? – Preguntó con una sonrisa
- Sí, es en serio
- Pues son completamente diferentes – Le dijo
- Sergey le dicen – Comentó Dima
- Tener sus años aquí tiene sus ventajas ¿no es así? – Sonrió
- Ciertamente si – Dijo sin darle importancia
- Luce bastante atractiva – Dijo Lena – Al menos de lejos
- Bueno, pronto la veras de cerca, porque ya nos vio y viene hacia acá
- ¿Qué? – Volteo asustada para ver a Dima
- Es cierto, y que evites voltear no hará que cambie de opinión Lena, ya te vio observándola
- Demonios – Dijo nerviosa y le dio un trago a su jugo
- Hola – Escuchó la voz de la chica - ¿Por qué tan sola? – Interrogó
- ¿Disculpa? – Lena volteó a verla sorprendida
- Sí, porque estás tan sola ¿cómo te llamas? – La interrogó
- Sólo dile que se vaya por donde vino – Dijo Dima y Lena volteo a verlo molesta haciendo que el chico volteara también – Bueno, si te gusta deberías decirle tu nombre y no mirarme de esa forma
- Por dios ¡no me gusta! – Le dijo nerviosa
- Es bueno saberlo – Dijo la chica junto a ella – No me has contestado, oh claro, no hablas con extraños, soy Yulia, Yulia Volkova – Le tendió la mano
- Elena – La estrechó
- Mi hermano viene a esta escuela ¿lo sabías? – Preguntó
- No, pero ahora lo sé
- Eres la chica extraña que no le habla a nadie y se la pasa hablando con su torpe amigo ¿no? Amigo que para todos es invisible – Sonrió y dirigió su vista a Dima un poco confundida – Sin ofenderte, claro, me pareces interesante, aunque a los demás les des un poco de miedo
- Tu comentario me ofendió – Dijo ella molesta
- Lo siento, es sólo que me dejé guiar por lo que mi hermano dijo de ti
- Bueno, tu hermano es obvio que ocupa lentes – Dijo molesta
- Oh sí, de hecho los usa, mira – Señaló al chico castaño de lentes, estaba sentado junto al chico que ella había pensado que era su hermano – Es un poco miope
- Pensé que era el que estaba junto – Dijo mirando a Dima
- Yo no te dije que era ese Lena – Dijo Dima molesto
- Debiste decir es el chico de cabello peinado como Barbie y los lentes – Le dijo molesta
- Bueno, sin duda tu comentario es un poco ofensivo para él también – Dijo Yulia
- Bueno, lo merece – Dijo Lena dirigiendo su atención a ella
- Bueno, tengo que irme – Se puso de pie ya que se había sentado junto a ella
- Suerte – Le dijo
- Gracias, espero verte pronto Elena – Le estrechó la mano
- Lena – La corrigió – Llámame Lena
- Me agrada Lena – Le sonrió – Nos veremos, espero que pronto
- Hasta luego – Le sonrió y la chica se alejó poniéndose las gafas
- Pero que descortés – Dijo Dima molesto
- Tu no fuiste muy amigable con ella, fue bueno que te ignorara – Frunció el ceño
- Pero te coqueteo con descaro – Gruñó
- Que lo vuelva a hacer – Sonrió ella

Dima estuvo un poco huraño por como lo había tratado Yulia, pero Lena estaba un poco alegre, Yulia le había gustado lo suficiente como para querer verla de nuevo, pero sería un poco complicado

- Creo que deberías venir a mi casa un día de estos a cenar Dima – Suplicó
- Lena, en serio, no puedo, a mis padres no les agrada que vaya a casas ajenas
- Pero eres mi amigo, mi padre cree que estoy inventándote y que realmente no existes
- Claro que existo – Dijo Dima molesto
- Yo lo sé, pero él es un poco... Cree que sigo mintiendo sobre la muerte de mamá y que eso me evita tener amigos
- Bueno, cierto, no le hablas a nadie más que a mí
- Bueno, tú eres diferente a ellos
- Tú también eres diferente a ellos – Le sonrió – Pero no puedo ir a tu casa a cenar, lo siento, nos veremos mañana
- Adiós – Dijo triste

Sonrío al ver al hermano de Yulia correr a la puerta, caminó resignada, tenía que convencer a Dima de que fuera a su casa un día de estos a cenar, sonrió al ver a Yulia, estaba sobre una moto, por un momento pensó que esperando a su hermano, pero el chico emprendió el camino con otro chico, caminó hasta Yulia y le sonrió

- Hola Lena – Le sonrió
- Hola – Contestó viendo la moto
- Oh, la moto, quería saber si podía llevarte a tu casa – Le propuso
- Mi casa está a la vuelta de la escuela – Le dijo
- Vamos es en serio – Dijo animada
- Es en serio, me hago diez minutos caminando – Le dijo
- Bueno, entonces... Podríamos tomar el camino largo ¿te parece?
- Te acabo de conocer ¿lo sabes? – Preguntó
- Claro que lo sé, pero de alguna forma tenemos que conocernos más ¿no lo crees? Y bueno... Si quieres que me regrese al colegio puedo hacerlo si eso te agrada más – Dijo divertida
- Bien – Aceptó
- Sube
- Haré lo que pueda, soy una torpe – Le advirtió
- No te preocupes

Yulia arrancó la moto después de que le paso el casco haciendo que Lena la abrazara asustada, olía bastante bien, se podía acostumbrar al calor que Yulia expedía

- Te ayudaré – Le dijo cuándo intentó bajarse de la moto – Si planeas caerte, procura que sea en mis brazos
- ¿Qué? – Preguntó sorprendida y perdió el poco equilibrio que había conseguido y se cayó, pero no en los brazos de Yulia
- Mis brazos estaban hacia el frente, no hacia un lado – Le sonrió divertida – Ahora te ayudo a levantarte
- Gracias – Le dijo y tomó su mano – Pensé que iríamos a mi casa – La observó
- Nunca me dijiste tu dirección – Argumentó lógicamente – Además, te pedí el camino largo ¿o prefieres directamente ir a tu casa y dejarme vagar por las calles yo sola? – Interrogó con una notable diversión
- Deberías dejar de burlarte de los extraños – Dijo molesta – Nunca sabes que harán