Analice la situación en la que me encontraba. Con un movimiento rápido coloque mi cuerpo de tal forma que pude evitar que fuera aplastado por el camión de carga.
No ví a la otra chica hasta que pude notar que el vehículo se había detenido. Yo estaba debajo de él.
Me arrastre como pude para salir de ahí. Al parecer aquella joven tenía la fuerza suficiente como para intentar escapar.
En un acto de enojo me levanté del suelo como pude, la perseguir y tire de su hombro, pero parecía ser que ella estaba gravemente herida de la rodilla derecha, lo que provocó que cayera al suelo.
-¿¡Qué rayos te sucede!?-
-¡Eres una maldita cobarde!, ¡eso es lo que eres!-
-¡Pero sí fuistes tú quién atacó por la espalda. Si tienes algún problema debiste habérmelo dicho en cara!- grité con gran furia, pero sólo conseguí una sonrisa como respuesta- ¿quién eres?, ¿qué te he hecho?-
Todo daba vueltas...Y fue entonces cuando caí un tanto inconsciente.
A lo lejos sólo podía escuchar a mi hermana pidiendo ayuda.
