Prologue: "The Beginning of my Adventures"

49 11 45
                                    

Narra Ima

Iba caminando tranquilamente hacía el Instituto. En mis audífonos resonaba Dark Paradise, de Lana del Rey. Sujetaba fuertemente mi bolso y mascaba mi chicle sabor a fresa.

Subí la pequeña colina en la que se encontraba mi odioso Instituto. Suspiré cansada y busque mi móvil en el bolsillo frontal de mi morral.

Eran las 07:40, por lo tanto, podía caminar a paso lento y llegaría a tiempo.

En ese momento, pude divisar a Ayato. Aquel muchacho de ojos verdes, era el más peligroso del lugar.

¿Porque? No lo sé.

¿Es lindo? Si lo es.

¿Estoy enamorada de él? Si, así es.

Me salí de mi trance al ver a una chica de castaña cabellera acercarse a él. Sin miedo. Sin temor.

Iba con una deslumbrante sonrisa y con andares inocentes hacía él.

Observé que le dijo algo, pero no pude ver más porque fui interrumpida por mi móvil, el cual sonaba a causa de la alarma, deteniendo la canción.

Maldije la hora, faltaban diez minutos exactos para entrar al Instituto; sino corría en este mismo instante me cerrarían las puertas del salón en mis narices.

Guarde los audífonos y apure mi paso para poder llegar a tiempo.

Pase de Ayato y aquella chica sonriente, que por cierto, comenzaba a molestarme que le sonriese tanto.

Ingrese a la escuela y cambié rapidamente mis zapatos. Mientras lo hacía, cierto pelirrojo ingreso acompañado de alguien que sonreía demasiado.

Si, me refiero a Ayato con aquella chica que, si seguia curvando sus labios, me darían ganas de golpearle.

Corri por el pasillo hasta las escaleras que conducen al edificio B.

En el último escalón, a mis zapatos se les ocurre salirse y hacerme tropezar.

-- ¡Santa mierda! --Exclame al ver mi rodilla raspada.

Camine en dirección al salón, y cuando entre, me encontré con la profesora sentada, con sus largas piernas cruzadas, corrigiendo exámenes.

-- Señorita Gine, por favor pase y tome asiento. --

Yo seguia parada en la entrada, sin entender el porque el aula se encontraba tan vacía.

-- Profesora ¿Y los demás? --Le pregunte una vez deje mi bolso en el lugar que siempre usaba.

-- Están en una asamblea de estudiantes. Hoy entraban más temprano. --Respondió, sin despegar la vista de las hojas.

¡Las Aventuras de Ima y Onnii!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora