Hay una niña corriendo en mi habitación, brinca y ríe por todo. Hay una niña jugando en mi habitación.
Ella me habla, charla sobre lo que le divierte, las cosas que hicieron sus muñecos. La niña no deja de parlotear.
Entró su hermano mayor, están peleando. Quieren ver quien come el último chocolate. Hay una niña llorando en mi habitación.
Su mamá trata de calmarla, su padre no está, ella espera que llegue. La niña extraña a papá.
El papá está llegando, ella se convierte en una liebre indefensa, que se acobija en un abrazo de papi.
La familia está sentada en mi comedor, tomando mate y comiendo torta fritas. La niña me mira y sonríe.
El padre está muy cansado, tiene muchos dolores, es una tortura para su cuerpo. La niña no lo sabe.
En esta casa no hay mucho, casi todo está construido de madera, cae agua del techo cuando llueve, mamá y papá se preocupan porque el dinero no llega a fin de mes. Y, ellos no lo saben.
Los hermanos están jugando, sentados en la cama, con una vieja consola, en una tele bastante pasada de época. Conseguido todo por el sudor de su padre.
La niña me mira.
-Es todo muy lindo ¿No?
Me quedo sin decir nada. ¿Acaso no ve?
-A veces, no veo a mi papi, y me enojo, se olvida de mi
¿Es o se hace? Su padre está sacrificando su cuerpo para darle los gustos.
-¿A que juegan? –Preguntó mamá, tumbándose en la cama, como si fuera a hacer un ángel-
Mamá.
-A ver, déjame probar –dice papá tirándose en la cama, al lado de mamá-
Papá.
Todos nos reíamos con las bromas que hacia papá mientras trataba de pasar ese nivel.
Las lágrimas se mezclaron con mi sonrisa, me aparte de las fotos y me senté en mi cama.
La bella pintura de mi niñez, fue pintada a mano por mis padres.
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Sariupi y sus días
Sonstiges"Mi diario personal." ¿Para que tengo que publicar mis pensamientos en Facebook? Mis desahogos, ideas, tonterías, todo en un solo lugar. Mi diario. ¡Bienvenido, lector, lectora, a mi!
