Dear Boss; Justin Bieber

Cap. 2

¡MALDICION! no se que demonios sucede con wattpad que ha combinado un capitulo que estaba en borrador con este que ya estaba publicado, tengo un vago recuerdo de como había escrito este capitulo pero por favor denle amor, me siento fatal, recuerdo que me esforcé demasiado en este capitulo *se va a llorar como una nena*
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-Señorita Stevens -volvió a nombrarme, me levanté rápidamente no si antes arreglarme el vestido que estaba ligeramente levantado.

Empecé a seguir a la señorita que hasta ahora no sabía su nombre, antes de salir de la sala escuché como las demás chicas murmuraban cosas feas acerca de mi vestido, me hacían acordar cuando...mejor no, no es momento, me prometí a mi misma superarlo.

Ambas subimos al ascensor donde la chica, mire el pequeño membrete que tenía, Isabella; apretó el botón del piso 8 e inmediatamente la cabina empezó a subir hacia su destino, se escucho el *Pin* al abrirse la puerta y ambas salimos, el sector era muy silencioso solo el sonido que hacia la señorita de recepción con su teclado.

-Buen día -la saludé amablemente.

-Buen día señorita, el señor Bieber la espera.

Le agradecí y empecé a caminar hacia la única oficina que había en esta planta. Me paré enfrente de esta, respiré y exhalé para controlar mis nervios, toque la puerta dos veces y se escucho un "Pase".

Abrí la puerta y caminé considerablemente para poder cerrarla. Observé detenidamente el lugar, todo estaba en su lugar, el grande estante donde se ubicaban los libros, estaban organizados por tomos, ladee levemente mi cabeza para salir de mi pequeño mundo para tomar asiento, la silla se giró sobre su eje así mostrándome a un hombre realmente apuesto, cabello castaño claro casi rubio peinado para atrás, unos hermosos y brillantes ojos color miel, piel blanca y tersa, de aquí podía notar sus músculos que se marcaban por encima de la tela, toda esa belleza adornado con una carísimo traje azul.

-No le pedí que tome asiento -dijo seriamente, retiró todo lo dije.

-Oh disculpe -dije levantándome pero el tomó mi mano y sentí algo raro recorrer.

-Ya no es necesario -dijo en el mismo que antes.

Toda la entrevista de la pasó haciéndome un montón de preguntas, a veces suelo ser muy "habladora" y pues ese lado mío no dudó en salir, al parecer al señor Bieber no le agradó por que sólo hacia callarme, sólo quería entablar una conversación con el que supuesta mente sería "Mi jefe" pero veo que es imposible con el.

-Estas contratada -dijo de repente haciendo que dejara de jugar con mis dedos.

-¡¿Que?! -dije emocionada.

-No lo voy a volver a repetir -dijo este arreglando algunos papeles que habían en su escritorio.

Me levanté muy emocionada y me fui hacía mi nuevo jefe para abrazarlo, estaba tan emocionada que el se sorprendió por mi actitud, hasta que me separó de el.

-Disculpe -dije bajando mi mirada- no pude controlarme, cuando me emociono demasiado suelo actuar de esa maneras pues...

-Que no se vuelva a repetir -dijo duro, durante todo el tiempo que he estado aquí no lo he visto hacer un gesto, siempre serio.

-Gracias -dije, regresé al lugar donde me había sentado para agarrar mi bolso e irme a festejar aún que no creo que se haga algo.

Camine hacia la salida, estaba más que emocionada, mi corazón palpitaba como un frenesí por tal emoción.

-Espero no venga con otra mancha como esa -dijo antes de que salga, me sonrojé inmediatamente de la vergüenza. -Algo más -dirigí mi vista hacia el -la señora de afuera te pondrá al día.

Esta vez si salí cerrando la puerta para luego dirigirme dónde estaba la supuesta mente señora que el señor Bieber me había mencionado, leí su membrete y decía Alisha Parker.

-Hola -dije sonriente- el señor Bieber me dijo que usted me iba a poner al día.

-Si -dijo sonriente- este va a ser tu lugar.

-Y usted -dije.

-Yo me voy a ir, muy pronto me voy a casar y estoy esperando un bebé -dijo la mujer con un brillo en sus ojos.

Estuvimos hablando de muchas cosas, también las cosas que tengo que hacer mientras este trabajando aquí como la secretaria del señor Bieber y no es tan fácil como creía por eso de que Alisha me dio su número de teléfono para comunicarme con ella por si había alguna duda o ayuda en algo.

-Bueno se me hace tarde -dije viendo el reloj que llevaba en la muñeca.

-Adiós, cuídate -se despidió dándome un fuerte abrazo -y felicitaciones.

-Muchas gracias -le sonreí.

Me dirigí hacia el ascensor, las puertas se abrieron y de este salió el chico que me había encontrado al salir del baño, como es que se llamaba, ah si, Chaz Somers.

-Hola, de nuevo -le sonreí amablemente.

-Hola y que tal, ese ogro te dio el trabajo? -me preguntó, yo asentí rápidamente. -felicitaciones.

Estuvimos hablando de cosas de trabajo, de como actuar en momentos que se nos presenta y cosas así, lo tomé como un consejo.

-Bueno, ya me tengo que ir -dije volviendo a ver mi reloj.

-Oh, te puedo llevar, si deseas -se ofreció amablemente.

-Mm...claro, si no es mucha molestia -dije sonrojándome, tengo 23 años y es algo que tengo que controlar, no puedo estar sonrojándome por cualquier tontería.

Ambos nos fuimos hacia fuimos ascensor dónde Chaz presiono el primer botón su nos llevaba al primer piso, estábamos en silencio, pero era un silencio para nada incómodo, solo íbamos escuchando la música del ascensor que salía por un pequeño parlante.

Llegamos y salimos del ascensor, caminamos hacia la salida pero algo o mas bien alguien me tomó por sorpresa, Alex quién tenia un ramo de rosas en su regazo, de los feliz que estaba se puso serio al ver con quien estaba. 

-¡Alex! -exclamé emocionada por tal sorpresa.