La felicidad tiene muchas formas de interpretarse. Lo que para uno es felicidad como comer pan con mantequilla árabe, para otros no lo es, ya que de seguro no le gustará la mantequilla árabe, pero sí el chocolate amargo, cosa que para otro, no le gusta el chocolate amargo, pero sí el dulce, o incluso le gusta más el manjar blanco (dulce de leche). Como ven, la felicidad es relativa para cuantas personas tengan un concepto distinto y único de felicidad. De repente para unos la felicidad es viajar a Disneylandia, mientras que para otros no, porque no soportarían las largas colas para cada atracción o juego mecánico o área temática cuando la temporada es alta y para encima, soportar el calcinante sol.
Para otros, quizás la felicidad sea ver por fin, un atardecer desde su casa, libre de deudas y con comida preparada o asegurada por un mes entero. Esa es una felicidad hogareña. Para otros, la felicidad es efímera cuando creyeron ganarle a la máquina tragamonedas de un casino y se den con la sorpresa que: o hubo un operativo anticasinos o el cambio monetario de lo ganado dentro de un casino se devalúe al salir del mismo, cuando el dólar está perdiendo terreno ante el yen o el euro, o viceversa, o incluso uno creyendo ganar los nueve millones de cualquier moneda de una lotería, se tope con la sorpresa que por temas de impuestos y pagos a una beneficencia pública, termine accediendo a tan solo 4.5 millones y el resto fue pura televisión, radio o actuación. La felicidad, como van comprendiendo, es más complejo y difícil de obtenerlo para cada uno. Es todo un asunto filosófico para debatirlo en una obra de tres tomos para que al final nadie lo lea, termine apolillándose o sirva para nivelar la pata coja de una mesa, que también podría ser la felicidad para esa pata coja, porque así mantiene estable la mesa.
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Time Sad
RandomNo son tonterías, Son esperanzas perdidas. Aquí viven sueños rotos, De el humano medio idiota, Que solo buscó felicidad con ella. Aqui viven sueños rotos, la desesperanza, y pensamientos de Una alma en pena cualquiera. Que lo último que quiere es ve...