*Narra Carly*
Martes por la mañana.
Me desperté a las 7 he hice lo de siempre, ducha y elegir la ropa, hoy no me apetecía vestir tan... como decirlo, como me visto yo siempre. Hoy me puse una falda negra por la mitad de los muslos, una camiseta granate por dentro, unos calcetines negros mas altos de las rodillas y unos botines negros con tacón.
Baje, bebí como siempre un zumo, esta vez de piña y uva. La verdad es que no se de donde saco tanto zumo... Me lavé los dientes e hice la " mochila". Cogí mis llaves y mi bolso grande. Salí de casa y abrí mi coche y me subí.
Llegué al instituto y aparqué donde siempre, nadie se quejó a si que no será de nadie.
Bajé del coche y me volví a colgar el bolso en el hombro y salí del coche, empecé a notar otra vez ojos mirándome. ''Solo llevo tres días aquí y ya me siento observada'' pensé. No si se me gusta que le gente me mire tanto. Estuve apunto de girarme cuando alguien me toco el hombro.
-Hola.-Dijo una voz ronca masculina por detrás mio.
Cuando me giré vi unos ojos color esmeralda y un pelo rizado.
-Hola.-Dije confundida. No sé que porque me hablaban, osea, no parecía su tipo de amigas.
-Soy Harry, Harry Styles.-Dijo estirando la mano para estrecharla con la mía
- Carly, Carly Tharton.-Dije estrechándole la mano.
- ¿Por qué no vas con el grupo de Spenceer?-Fué directo, suponía que quería algo o saber algo.
- Porque no me gusta ir con gente así. Ya lo hice hace mucho tiempo, por eso se perfectamente como son y lo que quieren. -Dije muy segura y empezando a caminar.
Harry se quedo un momento en lo que parecía un estado de shock, pero en seguida reaccionó y comenzó a andar a mi lado.
- ¿Y qué es de ti?-Dije curiosa, soy muy curiosa, lo que dicen de " la curiosidad mató al gato" , pues yo no me lo creo, porque aun no me han matado ni nada. Pero se que pronto pasara, pero es una cosa que no puedo parar.
-¿Qué es de mi?-Pregunto curioso-
-Si, no sé, tu viniste a saber algo sobre mi o sobre lo que hago, ahora quiero saber algo de ti.-Dije segura, no sabía de dónde había sacado tanta seguridad, seguramente cuando dejara de hablar con él me arrepentiría, pero necesitaba saber cosas de él, de ellos.
- Qué directa.-Dijo sorprendido.- Pues, no sabría decirte. No hay nada interesante en mi vida.-Dijo encogiéndose de hombros.
En ese momento sonó el timbre que indicaba el inicio de las clases.
-Será mejor que me vaya.-Dije dedicándole una sonrisa.- Encantada.
-Igualmente.-Dijo con otra sonrisa.
Entre al instituto y me dirigí a mi maldita taquilla, abrí y puse el horario que había impreso en la puerta por dentro. Miré que me tocaba, Literatura. ''Genial''. Pensé irónica, de verdad odio estas asignaturas, yo soy de ciencias.
Llegué a clase y solo habían dos personas, justo las dos personas que más me incomodaba que estuvieran aquí. El chico de ojos azules y Brad.
Cuando entré las dos cabezas se giraron y me miraron, el chico de ojos azules. Brad me seguía mirando y sonriendo y el chico de ojos azules solo me miraba. Los dos me siguieron con la mirada hasta que me senté en la mesa de al lado de la ventana más o menos en medio de la clase.
Yo cuando miré a Brad le dediqué una sonrisa, bueno más que una sonrisa, una mueca. Luego miré al chico de los ojos azules, no hice nada, solo miré a otro lado. Me seguía poniendo nerviosa.
El chico de ojos azules miró otra vez a dónde estaba mirando antes de que yo entrara y Brad se levantó y se sentó a mi lado. ¿Que querrá ahora?
-Hola.-Dijo con una sonrisa poniéndose a mi lado.
-Hola.-Dije un poco desinteresada pero sin parecer maleducada
-¿Qué tal el día?-Dijo acercándose a mi.
-Pues por ahora bien, ¿y el tuyo?-Dije sacando el estuche de las gafas y poniéndomelas.
-Bien. No sé porqué no te dejas la gafas puestas, estas igual de guapa o más. Si eso se puede.-¿Enserio? ¿No se le ocurre nada mejor?
-Gracias, supongo.-Dije rodando los ojos.
-Eres difícil.-Dijo de la nada.
-¿Qué?-Pregunté aturdida. Pude notar los ojos ojos azules posados en mi.
-Qué no eres como las demás, si fueras como las demás, ya estarías a mis pies.
-No es que sea difícil, es que esas chicas son muy fáciles.-Dije haciendo una sonrisa cínica.
Brad no dijo nada, solo se levantó y se sentó donde estaba.
La clase se empezó a llenar. La clase pasó rápido, bueno, lo rápido que se te puede pasar literatura. Apunté todo lo que pude, porque como dije no es mi punto fuerte.
Las próximas clases ya pasaron más rápidas.
Hasta que sonó el timbre que indicaba el descanso.
Recogí todo, me quité las gafas y fuí a mi taquilla. A mi estúpida taquilla. Podía notar muchos ojos puestos en mi y la taquilla no se abría, me estaba poniendo nerviosa.
-¿Me podrías hace un favor y abrirte de una maldita vez?-Dije en voz baja.
-¿Otra vez peleándote con la taquilla?-Dijo una voz ronca por detrás. Era Malik.
-Si.-Dije mientras giraba sobre mis tacones.
-¿Te ayudo?-Dijo con una sonrisa. No parece tan malo como dice Spenceer.
Yo no contesté, me dice a un lado y le hice un gesto para que lo intentara.
Estuvo un rato, pero no podía abrirla.
-Qué, ¿puedes?-Dije con una sonrisa graciosa, intentaba aguantar la risa, pero era difícil.
Malik no dijo nada, solo se rió.
-Anda quita.-Dijo una voz femenina, era Mo.
Mo se acercó y le pegó un puñetazo en la parte de arriba, luego empujó y se abrió sola.
-Gracias.-Dije mirándoles a los dos.
-No las des.-Dijo Zayn
-¿Te quieres venir con nosotros?-Dijo Mo pillándome por sorpresa
-¿Qué?-Dije algo confundída
-Ahora. Sé que no te gusta la gente, pero por si te apetecía estar con gente, relacionarte, ya sabes.-Dijo Mo algo incómoda.
-Pues...no sé... no creo que tus amigos quieran que esté con ellos.-Dije con un poco de vergüenza.
-Que va, si estamos todos de acuerdo. Bueno, menos..- Antes de que pudiera decir nada Mo le interumpió.
-Todos estamos de acuerdo.-Dijo Mo fulminando con la mirada a Malik.
