Mi salvación (Cap 31)

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[Narra Lucy]
Me desperté temprano, no pude dormir mucho en la noche, una y otra vez pasaba por mi mente la imagen de Marc tocandome, no se como pude haber estado con una persona así, me da miedo pensar que hubiese pasado si Fede no llegaba a tiempo. Me levanté de la cama y me fui a bañar, cuando terminé fui a la cocina y mi mama me estaba esperando con el desayuno.
-Mama: ¿Hija que haces levantada? -se levanta y me abraza.-
-Yo: Tengo que ir a ensayar ma -se aparta y me mira raro.-
-Mama: ¿Con todo lo que te paso tenes que ir a ensayar? -empieza a levantar el tono.-
-Yo: Es mi trabajo mamá, no puedo faltar. -me siento para comer el desayuno.-
-Mama: Lo sé hija, lo siento. Es que no puedo evitar pensar en lo de ayer, si algo peor te hubiera pasad....
-Yo: Eiii -la interrumpo y me paro.- Estoy bien ma ¿Si? -la abrazo.-
En ese momento suena mi celular que estaba arriba de la mesa, voy lo agarro y sonrío al ver que es un mensaje de Fede, lo leo y le respondo.
-Mama: ¿Y esa sonrisa? ¿Quien te mandó un mensaje?
-Yo: Em nadie nadie
-Mama: ¿Es el chico que te trajo ayer a la noche no? -sonríe.-
-Yo: Sí es el -le sonrío.-
Termino mi desayuno y me voy derecho para el teatro. Despues de 10 minutos de viaje llegué, entro y parece que todos estan sorprendidos al verme, todos me saludan con un beso y un abrazo. Voy para mi camarin pero al llegar a la puerta no logro entrar, no puedo, no estoy preparada para ver y recordar todo lo que pasó ahi adentro, empiezo a llorar. Escucho pasos, me saco las lagrimas rápido y veo que se me acerca Pedro.
-Pedro: Lucy viniste -me abraza fuerte.- ¿Como estás?
-Yo: Bien -Finjo una sonrisa.-
-Pedro: ¿Segura que quieres ensayar?
-Yo: Sisi, lo necesito.
Me quede un rato mas charlando con Pedro y mientras me iba contando la escena que íbamos a ensayar, voy caminando y todo me recuerda a lo que pasó, no puedo concentrarme en lo que me esta diciendo Pedro, cada vez me siento mas agobiada, tengo ganas de llorar y correr, necesito escaparme de este lugar, Pedro me sigue contando y yo no puedo escucharlo. De golpe veo que se abre la puerta y entra él, siempre es mi salvación.

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