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🌞 Dedicado a Sool_San 🌞

La única razón del por qué Baekhyun había aceptado el trabajo era porque necesitaba con urgencia la paga para comprarse los cuatro tomos de Medicina I que su carrera le estaba exigiendo. No había otro motivo, ni otro fin, simplemente necesitaba sobrevivir porque ya su madre hacía mucho con los pagos generales. Tampoco era el trabajo más remunerado del planeta, pero de eso a lavaplatos en McDonald's era demasiado.

Suspiró profundamente, una intensa brisa despeinó sus cabellos color grisáceo; el sol de verano se estaba haciendo cada vez más inclemente, y de inmediato lo hizo desear una buena limonada. Un poco fastidiado, y algo fatigado por el calor, fue despojándose de sus prendas, para sustituirlas por el típico short rojo de trabajo y qué trabajo tan exhibicionista. Pero Baekhyun no se quejaba, ser guardián de la playa le permitía disfrutar del sol y el agua al mismo tiempo, de un buen bronceado y esplendor a su vista.

—¡Oh, ya estás aquí! —escuchó decir de Hwasa, la chica que le había conseguido el lugar en el equipo de salva vidas de la playa de Gongyang.

—Sí, decidí venir en bicicleta porque así evito el tráfico.

Hwasa asintió mostrándole esa mirada tan típica de ella y que traía muerta a la población masculina que no era gay. Tenía algo que hacía que todos quisieran ahogarse sólo para ser rescatados por ella, y posteriormente, ser besados por sus finos labios. Era un monumento de mujer.

—Buena idea —aludió ella, colgándose la toalla blanca en el hombro y moviendo el trote junto a Baekhyun.

Su cuerpo le daba sentido al traje rojo de una pieza.

Baekhyun apenas tenía dos semanas trabajando en la playa desde que habían sido declaradas aptas para el público. Haciendo uso de sus conocimientos de RCP, y de su destreza para nadar, se ganó la confianza del líder del equipo, y posteriormente un lugar. Como dijo, la paga no era la gran cosa pero se divertía mucho ayudando a los niños en el agua, y entablando conversaciones con los turistas porque resultó que su inglés era muy bueno.

Luego de salir de los cambiadores, Baekhyun se dirigió a su torre despidiéndose de Hwasa porque ella estaba ubicada en otro lugar, subió las escaleras con su silbato y sus binoculares en mano y esperó paciente a que nadie se le ocurriera entrar al agua luego de haber comido, o que los niños mantuvieran la advertencia de sus padres de que adentrarse al mar era peligroso. Quería tener un día tranquilo, disfrutar de la música playera, beber algo frío para el calor y pensar que muy pronto iba a tener el dinero suficiente para comprar sus libros.

Pero entonces ocurrió lo que Baekhyun jamás se imaginó, incluso tuvo que tallarse los ojos porque no podía creerlo, era casi inconcebible ante su mirada todo el espectáculo que estaban presenciando sus ojos.

—Joder.

Sin embargo sí podía, claro que podía.

Portaba esa sonrisa radiante que muy pocas veces mostró en el pasado, el cuerpo descubierto salvo su zona pélvica, un traje de baño ajustado de color negro que resaltaba esa piel que había sido blanca y ahora estaba un poco bronceada, el pelo tan negro como la noche y desfilando cual modelo delante de la vista escéptica de un Byun Baekhyun en shock, revolucionado y sorprendido. Un Baekhyun abrumado.

Era Do Kyungsoo, no había duda ahora que la imagen era más nítida, tan cerca. Un poco más corpulento, más alto, y arrolladoramente más guapo. Era él, para el asombro de Baekhyun.

—¡Baekhyun-ah, ¿estás bien?!

Baekhyun salió de su estupor en tanto escuchó el llamado de Park Chanyeol, uno de sus amigos y su ex (Baekhyun tenía muchas relaciones fallidas, pero ninguna como la que tuvo con Kyungsoo).

—Parece que acabas de ver a un fantasma —agregó Chanyeol, con las manos sobre los ojos para que el sol no le diera de frente.

Y vaya que estaba en lo cierto, Baekhyun tenía dos años sin ver a Kyungsoo. Desde que terminaron, la comunicación entre ellos había sido terriblemente nula. Y es que, viviendo Kyungsoo en Busan las cosas se hacían imposibles, de hecho, esa fue la razón principal por la que terminaron. Ninguno quería vivir un amor de verano y nada más.

—Pues fíjate que.... ¡Oh por Dios, Kyungsoo viene para acá!

—Kyung... ¡Dios mío, tú no me dijiste que era así de guapo!

—¡Cállate!

—Baekhyun...

—¡Kyungsoo!

Estaba a sólo unos escalones de separación, aún así Kyungsoo no se veía afectado por el sol en absoluto, al contrario, parecía disfrutar de el y hacerse dueño y señor de la arena, el mar y el viento veraniego que estaba soplando en la playa.

—Tanto tiempo —siseó; Baekhyun asintió y aunque sus pies y piernas temblaban, bajó de la plataforma y se enfrentó a esos ojos negros que lo incitaban a pecar—. Lindo color de pelo.

Baekhyun se tocó el pelo por inercia, sólo así se dio cuenta que sus dedos también estaban temblando, por Dios, dos años y todavía no había superado ese gustito que le provocaba la sola respiración de Kyungsoo, o bueno, gustito era un eufemismo para decir que todavía seguía colado con el ex con el que perdió la virginidad; y no tanto eso, realmente había querido a Kyungsoo, casi tanto que abrumaba.

—Gracias..., uh, es bueno verte después de tanto tiempo.

Kyungsoo se sacudió su pelo negro y las hebras cayeron repartidas en su frente, se veía tan candente como el mismísimo sol que estaba imperioso en el cielo, sin nubes.

—El verano de Seúl es el mejor.

Hace tiempo Kyungsoo se esforzaba bastante para reunir dos o tres palabras en una misma oración, era tímido y adorable. Este chico frente a Baekhyun era otro, otro que tras su despedida dijo «Bueno, voy a darme un chapuzón», batió sus caderas semi desnudas de un lado a otro y dejó entrever la tersura de su piel y la dureza de sus muslos.

Ah, verano caliente nunca se había sentido tan literal.

🌞

¿A quién le gusta el BaekSoo? 🌞 A mí y a ti, y a la cumpleañera.

Soooooooooooooooool, feliz cumpleaños, espero que esta serie de viñetas sean de tu agrado y amors, en serio, quería subirlo todo junto pero me venció el tiempo, así que lo dejé en viñetas, igual disfruta de BaekHyun veiguach!AU y de Kyungsoo Hot 🌚👌

Te quiero mucho, oppa 🌚

Hot Soommer → Top!SooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora