Cuando baja la marea, te veo bajando la mirada como en aquella mañana, cuando más dura es la despedida más cargada viene esa fría botella de un duro ron, quiero volver a despertar con tus labios junto a mí como en nuestra primera velada, mi vida se empieza a desmoronar y oscurecer sin ti otra vez, por eso en aquellos poemas que te escribía mi amor te decía, no me dejes nunca o volveré a caer en aquél oscuro y profundo pozo.
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Mi pequeña paranoia.
PoesíaEn esta historia podréis explorar la locura que son mis pensamientos.