Parte única

1.4K 165 237
                                    

-Mickey, ya te he dicho que no tienes que venir a verme en todos mis entrenamientos. Si ibas a desperdiciar tu tiempo libre no te hubieras retirado del patinaje.

-No me he retirado, simplemente me tome un descanso. Además - dije tomando la mano de mi hermana dándole un tierno beso.- no time spend with you is wasted.

-¡Ya quisiera que me dijeran cosas tan lindas!

Esa voz...

-¡Emil!- llamo mi hermana.- me alegra que vinieras.

-¿Huuh? ¿Estás feliz de verlo a él pero no a mí que soy tu hermano?

-A ti ya te he visto muchas veces durante toda mi vida. Deja que conozca gente nueva.

Sara abrazó a Emil Nekola. Desvíe la mirada. No quería presenciar aquella escena.

-¿No me darás un abrazo?- dijo Emil posando sus brazos sobre mis hombros.

-¡A-aléjate de mi!- dije tratando de quitármelo de encima.

Estaba tan cerca que podía sentir como mi corazón latía sin control; el olor de este chico llegaba hasta lo más profundo de mis sentidos. Mi cara comenzaba a tomar color, tenía que evitar que me vieran así.

-Voy... Voy al baño, ahora vuelvo.

Casi corriendo me fui a los sanitarios. Tenía que tranquilizarme, coordinarme. ¡No me puedo poner así cada vez que él aparece!

-Demonios...

tenía una ligera sensación de frustración y esta empeoraba cuando recordaba el como Sara abrazaba a Emil.

-¿por qué a mí?- dije a penas susurrando.



-¡Mickey! Sara está por terminar hoy, ¿quieres ir a comer con nosotros?

-Claro.- conteste sin mirarlo a los ojos.

-Oye, Mickey ¿pasa algo? Te he notado muy extraño estos días.

-No es nada.

Trataba de actuar lo más tranquilo posible pero era imposible ¡él chico estaba sentado justo a lado mío!

-Vamos, vas a hacer que Sara se preocupe.- se acercó aún más, Emil estaba casi encima de mi. Su mano rozaba mi pierna y podía sentir su respiración cerca de mi cuello.

-N-no te acer...cerques tanto.- hablaba a duras penas... Estaba nervioso, Emil solo se acercaba más.

No más, aléjate... Por favor... O yo voy a...

-¡Mickey, Emil! ¡Vámonos!

Pegue un brinco a penas escuche la voz de mi hermana Sara. Emil seguía sentado donde estaba hasta que ella lo volvió a llamar.


Encontramos un café cerca del hotel donde nos hospedábamos. Los tres pedimos lo mismo y comenzábamos a platicar de cosas sin sentido pero yo siempre terminaba excluido por ambas partes.

¿cuándo fue que ellos dos se volvieron tan unidos?

-Voy al baño.- dije levantándome de la silla.

-Parece que ya le agarraste cariño al baño, Mickey.- dijo Sara pero solo la ignoré.

Mientras caminaba podía presenciar algunos lindos detalles del lugar; la mayoría de las decoraciones eran talladas en madera. Pose mis dedos sobre ellas y podía sentir cada pequeño detalle que tenían, era sorprendente ya que, sin darme cuenta, todo representaba una ciudad.

No Puedo Decirte Adiós《EmilxMickey》 【One-Shot】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora