• Manipuladora •

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- ¡Vamoos,  no seas aburridaa!

- No es que sea aburrida es que simplemente no tengo ganas, sabes que no soy de ir a muchas fiestas.

- Pero es verano Brooke, deberías disfrutarlo, tienes casi diecisiete años, estás con la cabeza metida en los libros absolutamente todo el tiempo, eres muy guapa y tienes el permiso de tus padres, sin contar con que tienes un armario repletamente lleno de ropa hermosa que no usas. ¡Vamos, diviértete un poco! Habrán muchos chicos lindos en la fiesta y definitivamente más de uno querrá encerrarse contigo en el cuarto de huéspedes.

- Qué cosas dices Lucy, mis libros son mi manera de diversión y no podrás convencerme de ir a esa tonta fiesta.

Lucinda Portman, odia su  nombre así que la conocen como Lucy, o también como la loca de la preparatoria Cosswell, mi mejor amiga desde los siete años, y la persona que hace que vomite cada vez que escucho sus historias de lo que pasa en cada una de sus fiestas. Sí. Sexo. Iugh.

Como ya estarán pensando, sí, soy virgen, y no está en mis planes dejar de serlo por ahora.

No me gusta presumir, pero mi familia es de las más millonarias de todo Estados Unidos, la mansión en donde vivo está repleta de empleados, obviamente porque no soy la única que vive aquí.
Vivo con mis padres y mis dos hermanos, Sebastian de 18 y Alexa de 6.

Cada fin de semana es una lucha nueva con Lucy por no ir a una fiesta. Las odio, no me gusta entrar a una de ellas y ver a chicos de mi edad comiéndose o a punto de caerse por la borrachera. Odio ese tipo de espectáculos. Y ni hablar de los olores. Ag. Esta vez no cederé, no me convencerá.

* 2 horas después *

- ¡Eres una maldita manipuladora!- Estaba gritándole a Lucy ya que no me escuchaba por la bulla.

- ¿Qué?- Dijo una Lucy completamente borracha y hasta se podría decir que medio muerta.

- ¿Cómo es posible que ya estés ebria? ¡Maldita sea, Lucy! ¡Llegamos hace una hora!

- Lo sé, pero es que el chico de la barra estaba tan bueno que decidí pedir cada vez más para poder conversar con él. Ya tuvimos sexo en el baño de arriba. Lo hace tan bien. Le pediré su número. - y se fue.

- Putamadre.

- ¡Hey! ¿Quieres bailar un poco?

Me di la vuelta y un chico lindo y aparentemente sobrio me estaba estirando la mano.

- ¿Me dejarás eaperando?- dijo soltando una pequeña risa.

- ¿Qué? Amm, eh, ¿me hablas a mí?

- ¿Ves a alguien más?

- En realidad veo a mucha gente.

- Jaja, sí te estoy diciendo a ti...- y se quedó mirandome como preguntándome algo.

- Brooke, mi nombre es Brooke.

- Bien, Brooke, entonces, ¿bailamos o te invito una cerveza?

- Prefiero la cerveza.

- Pues adelante, bella dama. - hizo una reverencia. Tarado.

Caminamos hasta la barra. Wao, en serio el chico de la barra era muy lindo. Lucy tenía razón. Perra inteligente.

- ¡Jaison! ¡Dos cervezas hermano!

- A la orden, Pelos.

-¿Pelos?- pregunté riendo.

- Me llamo Franco, creo que entiendes mi apodo. - ¿Será por la cabeza de trapeador que lleva? Oh, Brooki, cómo crees.

Bueno ahora sé que se llama Franco. Ya conozco algo de él.

Summer 2017 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora