Un verano en la nieve [Harry Styles y tú] PAUSADA

Capítulo 10: Elena Marin.

Para @nialler__laugh ¡Gracias por leer!

(Si queréis que os dedique un capítulo pedídmelo :) )

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Mi prima me miró con cara de susto.

-¿También había una pelirroja violadora?-Preguntó mi hermano.

Claudia me miró con una cara aún más extraña. No sé de qué se extrañaba, en mi familia éramos todos así, y eso la incluía a ella.

-No, pero en esa historia Ginny era una hija de la gran puta, ya os pasaré el link por whatsapp.-Dijo Petunia, para después girarse hacia Narciso.-¿Has visto? Soy una moderna, me voy a hacer chica Tumblr.

Ella continuó contándole a su hermano su maravilloso y muy pensado plan para convertirse en una mujer muy famosa en internet, diciendo algo así como que el secreto estaba en teñirse el pelo de colores pastel.

-¿No venía Helen contigo?-Pregunté mirando a Claudia, recordando lo que me había dicho unos minutos antes.

Helen era nuestra prima política, sobrina de la madre de Claudia. Cuando éramos más pequeñas nos pasábamos el día jugando juntas, y todo el mundo pensaba que Helen y yo éramos hermanas, ya que a pesar de no tener nada de sangre en común, nos parecíamos mucho.

Era de la edad de mi hermano, es decir, un año mas mayor que yo, y siempre había tenido la esperanza de que algún día se convirtiera en mi cuñada, aunque ella nunca había estado muy por la labor.

-Sí, se supone que vendría, pero no sé dónde está, ahora que lo pienso, estaba detrás de mi.-Dijo Claudia pensativa, mientras se llevaba una mano al mentón.-Sí, sí, iba detrás de mí, es más, estaba explicándole cómo se hace adecuadamente un seguimiento-espionaje a un chico, sin dejar huellas y sin que te pillen. Que por cierto, es una técnica ninja que he estado perfeccionando durante muchos años, mira, ______ todo lo que tienes que hacer es...

Por suerte llamaron a la puerta, juro que estaré eternamente agradecida a quienquiera que haya llegado.

Theo fue a abrir, a paso ligero, seguramente para descansar los oídos de la chillona e incansable voz de Claudia.

-¡Elena!-Oí gritar a mi hermano.

Yo corrí hacia la puerta, ansiosa de ver a mi ¿prima? Bueno, a mi amiga, vosotros me entendéis...

Y allí estaba ella, tan arreglada como siempre, con su maquillaje, su peinado, sus uñas todas pintaditas y sin una imperfección...

-¡______! Que guapa estás, cada día te pareces más a mi, y ya casi eres más alta que yo, pequeñaja.-Dijo ella abrazándome.

-Pues tu sigues igual de fea y gorda.-Mentí para hacerla rabiar.

-Bueno, vale, a mi no me saludes, ¿eh?-Dijo Claudia indignada.-Te recuerdo que aquí soy la única que es sangre de tu sangre, y me ignoras. ¡Menuda prima!

-Menuda prima tú, que me dejaste sola en la parada de autobús mientras te ibas con un rubio y le contabas no sé qué de acosar a gente. El pobre tenía una cara de susto...

Claudia se puso roja al instante, y yo comprendí perfectamente porqué. ¡Había quedado como una loca delante de un tío! Por lo menos no le conocía de nada, porque si no...

-Oye, y ese chico...¿Era guapo?-Preguntó Theo.

Espera un momento, ¿Theo? ¡Lo sabía! Siempre había dicho que era gay, ese estilín que tenía no era de un hetero, era de pluma pluma gay.

Lo malo es que si no era hetero no le podría liar con Elena, y tendría que buscarle un buen maromo potente, pero no iba a ser muy fácil, porque claro, mi hermano está como una cabra, y es raro de narices.