Capitulo 10

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Hola- le dije desde la puerta

Hola- me contesto- entra, ven – me dijo señalando un lado del banco donde el estaba sentado

Me adentre en el closet, ya estaba casi todo, solo faltaban los zapatos

Gracias por lo de la cama- le dije sentándome

De nada, quería hacer algo por ti cariño- me dijo sonriendo

Gracias, me haces sentir súper bien, eres muy especial- le dije mirándolo a los ojos, así nos quedamos un buen rato y nuestros cuerpos se fueron moviendo hasta quedar demasiado cerca.

Me va a besar pensé, esto no está bien, no me gusta ser infiel, le puse la mano en el pecho y sentí su corazón a mil. Lo mire a los ojos y los míos se aguaron.

Tranquila, no llores- me dijo poniendo su mano en mi mejilla.

Lo siento, no puedo, no me gusta hacer algo que no me gustaría que me hicieran, yo tengo pareja, aunque no parezca -dije y se me salieron las lágrimas.

Tranquila por favor, no llores y discúlpame, no debí

No, no lo digas- lo interrumpí

Como quisiera que fueras soltera, Isabel tú me gustas, me gustas mucho y no soporto ver cómo te pones mal por él, como él te trata, desde que te vi en la oficina de George me quede hipnotizado con tu mirada- le puse la mano en los labio, no quería que siguiera, porque a mí también me paso lo mismo.

No sigas, por favor, a mi también me paso lo mismo, y siento lo mismo – le dije abriendo mi corazón.

De verdad- me pregunto con ilusión

Si- le conteste mirándolo a los ojos

Por favor no llores, no puedo decir que te esperare, pero en lo que regresas a tu país hare que pases el mejor fin de semana y que te des cuenta que tu vales mucho, como para estar con alguien como el.

Yo no puede más que abrazarlo fuerte. Que fácil sería enamórame del. Y que difícil seria mi trabajo.

En ese momento entro Nacho a la habitación.

Tortolos- dijo desde la puerta del closet y yo me puse roja.

Que?- le dije

Lo que escuchaste, ya los chicos están reunidos esperándolos- nos dijo sonriendo

Yo me puse roja como tomate y sé que Missis se puso igual

Bajamos ahora- dije jalando a Missis por la mano para salir

Nacho- dije volteándome

Tranquila que solo nosotros nos dimos cuenta- yo me quede de una pieza al escuchar eso

Como es?- le pregunte

Que crees, que no nos hemos dado cuenta de que ustedes se gusta?- pregunto

Bueno, yo, este- me puse demasiado nerviosa como para decir algo coherente.

Tranquila cariño, nosotros no diremos nada- me dijo Nacho

Gracias- dijo Missis a su compañero

De que, ustedes merecen ser feliz- dijo Nacho, pero más mirándome a mí que a Missis

Gracias, bajemos- les dije a los muchachos

Si- contestaron los 2

Ya en la sala con los muebles nuevos, se sentaron todos en el sello y yo me quede de pie delante de ellos.

Hora de la verdad- dije a los chicos, todos se pusieron serios y atentos. Eso es bueno por que saben distinguir cuando estar serios y cuando pueden relajar.

Cambio de planes ( Alberto Missis- Dvicio) TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora