Charzan, The Fanfiction

Capítulo 2: Amigos.

"Siento que estás llevando esta mierda a la friendzone
cuando te hablo, no te importa
para ti, yo soy nadie.

El amor es así, me siento abrumado de nuevo.
Si no estás seguro, amor,
solo hazlo, tómalo o déjalo."
JiMin Park "다시 너에게" featuring Hash Swan

El tema "Katie" había sido enterrado en el olvido y fue tan rápido como un chasquido para Kyle y Calvin.

Aquella mañana Calvin no había pensado mucho nada, parecía uno de esos días en que todo iba a ser exactamente al día anterior: Plano y aburrido. Por la cabeza de aquel muchacho de piel pálida lo único que cabían eran pensamientos acerca de... ¿Era eso posible? Bueno, era normal pensar en tus amigos cuando vas camino a la escuela pero ¿Era normal pensar tanto en su mejor amigo? A veces, Calvin trataba de dar como menos esos pensamientos, estaba exagerando.

Pero lo complicado venía al admitir que su corazón se aceleraba cuando lo veía. Los brazos de Kyle eran dignos de un dios: El hockey lo había vuelto ligeramente musculoso y fuerte, su piel apiñonada (y con ligeros signos de acné), una quijada pronunciada pero no desagradable eran algunas de las cosas que Calvin creía admirar, en realidad, cosas que adoraba del contrario, además del contraste de alturas, obviamente. Kyle no pasaba de los 170cm y Calvin, con su 1.80 daba lugar a 10 centímetros que por otros aspectos, les daba ese aspecto de "Pequeño y grande".

Era una mañana fría, la madre de Calvin lo había llevado a la escuela como siempre. Mientras caminaba hacía el salón en un edificio lejano del campus, Calvin pudo divisar a lo lejos a Kyle, por lo tanto apresuró el paso para alcanzarlo.

—¡Hey!— Gritó tan pronto estuvo a escasa distancia del más pequeño, rápidamente pasó su brazo por los hombros contrarios. Kyle reaccionó volviendo la vista hacía su amigo, sonriendo ampliamente. —Hey, ¿vas llegando?— Fue la pregunta que "Matty" le hizo a su ahora acompañante mientras chocaban los puños. —Sí, mi mamá me vino antes de irse al trabajo, tuve que correr para alcanzarte.— Acotó mientras acomodaba su snapback azul marino sobre su cabello castaño claro.

Podría parecer que ninguno de los dos lo quería saber y menos aceptar, pero ese abrazo le alegraba el día ambos y podías decir, tan pronto los veías, que chispas salían de ellos tan rápido como sus miradas se cruzaban.
Era como si estuvieran al tanto de los sentimientos del uno hacía el otro, sin decir nada pero diciéndolo con cosas tan normales como era saludarse.

Calvin no soltó ni por un momento a su amigo, no porque hubiese olvidado quitarle el brazo de los hombros, sino porque le gustaba la sensación de abrazarlo. —¿Qué perfume traes? Huele bien, ¿verás a alguien hoy o qué?— Cuestionó bajando los ojos a su amigo, quién levemente sonrojado aseveró. —Sí, sí, veré a alguien hoy. Y gracias, apenas lo saqué esta mañana de la caja.— Fue la respuesta que dio Kyle mientras sonreía grande. "Lo hice para ti" gritaba su interior, tratando de llamar la atención de su acompañante, aunque era obvio que no sucedería.
"Hueles tan bien..." pensó Calvin antes de soltar de imprevisto a Kyle para saludar a un amigo más.

En la puerta del salón, con dos vasos de café en las manos estaba Alestair, quién tan pronto vio a Calvin, le extendió uno. —Cómo te gusta...— Mencionó antes de chocar su mano al más alto y dedicarle, por alguna razón, un vistazo desagradable a Kyle.

"¿Qué no, se supone, somos todos amigos?"