EL PROFE IDEAL

LA VUELTA AL PASADO

Los años no paraban de pasar y yo no podía dejar de pensar en aquel hombre del que estuve locamente enamorada "Samantha tienes marido" me recuerda mi subconsciente. Suena la alarma del móvil, son las 8 de la mañana y me dirijo a las habitaciones de mis hijas y bajo las escaleras para preparar el desayuno.

Oigo que los tablones de la escalera suenan y veo a Jenny, mi hija mayor de 16 años.
- Mamá, papá es el primer hombre del que te enamoraste? - dice Jenny observando el tenedor.
- Por supuesto que no, he tenido un novio antes de que me casara con tu padre.
- Y quien era?
- No te conviene saber la respuesta, venga acaba de desayunar que llegarás tarde.
Ya son las 8:30 y me dirijo a la entrada con mi hija Sara de 8 años para llevarla en el coche al colegio.

Cuando voy avanzando por la carretera, me doy cuenta de que hay atasco y toco el volante con tal de que alguien adelante. Pero observo que el coche de delante, esta perdiendo aceite. Así que me dirijo a avisarlo:
- Hola. Perdona que te moleste pero tu coche está perdiendo aceite.

El misterioso hombre baja la ventanilla y me dice:
- Ah vale,gracias.

Pero entonces observo algo que me lleva a mi pasado. ¡¡Oh  no por Dios no puede ser es... Morgan!!
- Perdona, nos conocemos de algo? - digo intentando maquillar lo que está pasando.
- Un momento tú eres... Samantha!
- Si soy yo.- digo mirando con cabeza gacha al suelo.

Oigo una voz al fondo del coche que dice:
- Que pasa cariño?

No puede ser, ya tiene novia. Bueno es normal ya han pasado 5 años de lo nuestro, que por cierto, jamás olvidaré.

Me dirijo al coche y escucho que mi hija me pregunta:
- Porque has tardado tanto, llegaremos tarde al colegio.

Miro el reloj, ostras son las 9:15 y Sara tendría que haber entrado a las 9.

Voy siguiendo la carretera pensando en lo que acaba de pasar, lo nuestro es un caso muy extraño pero esque no me lo puedo quitar de la cabeza. Y más sabiendo lo que me acaba de decir mi hija mayor. Pero quién sabe alomejor a ella le pasa lo mismo que a mi. Pero espero que no. Y si le pasase yo la comprenderia, no como mi madre a mi.

Ahora mismo no es que mi matrimonio esté atravesando un momento bueno, a lo contrario, hay muchos baches. Mi marido no para de salir por allí de fiesta con sus amigotes mientras yo me quedo cada día sola en casa por la noche con mis hijas. 

El día sigue avanzando con normalidad, voy al colegio a recoger a mi hija Sara y llegamos a casa. Ella se dirige a hacer los deberes a su habitación y entonces el móvil empieza a sonar. Es Morgan! Si. Todavía guardo su número de teléfono:

- Hola Samantha, como estas? 

- Bien. - digo maquillando los errores de mi matrimonio.

- Oye, creo que tendríamos que quedar para hablar, porque creo que no lo dejamos en buenas condiciones cuando...  ya sabes.

- Sí. Y estoy de acuerdo. - digo un tanto ilusionada por el momento tan angustioso que he estado viviendo todos estos meses.

- Quedamos en mi casa mañana?

- Vale. A las 4:30? - digo marcando la fecha.

- Vale, adiós. - dice. Acto seguido cuelga el teléfono.

Estoy deseando que llegue ya mañana, ya que, tengo muchas cosas que soltar, y la verdad  no todas son buenas.

Son las 8 de la mañana, llevo a mi hija al colegio y he pedido a una madre que me recoja a Sara después a las 5. Porque yo he quedado a las 4:30 con ya sabéis quién.

Me llega un mensaje de Morgan con la ubicación de su casa y rápidamente me dirijo a ella:

- Hola. Adelante pasa. - dice abriendo la puerta.

- Verás si no te importa me gustaría ir al grano. - digo dirigiéndome al comedor.

- Vale.

- Empiezo yo: porque me olvidaste cuando te fuiste a la otra universidad sabiendo lo que habíamos tenido?

- Pensaba que si estaba con otra chica me olvidaría de ti, pero no he conseguido olvidarme de ti.

- Ah. - digo sin articular palabra alguna.

- Yo si te soy sincera tampoco me he olvidado de ti. - digo con la verdad por delante.

Sus labios se acercan a los míos lentamente y......