Juegos sexuales

Piedad

"-Ten piedad de mi corazón.-"

Dicen que cuando te llenas de adrenalina no escuchas nada, no sientes los golpes, prácticamente tu sentir y razonar desaparecen pero él era su razón, él era su locura, el era lo contrario de todo lo que podía decir.

El dolor de las palabras dependen de la persona, el odio en la mirada duele cuando el propietario es la persona que uno ama y la destrucción está en las manos de aquella persona a la que denominamos "Nuestro amor verdadero"

El recuerdo de la linda carita de muñeco en ese momento jamás se borrara de su memoria, en sus sueños vera esa imagen mientras escucha las palabras amargas de su corazón.

[...]

Las personas corrían hacia la construcción, nadie sabia que hacer o como reaccionar ante aquella situación. Gritos de auxilio y maldiciones inundaban el edificio.

Las autoridades junto con algunos miembros especializados llegaron al lugar y por su puesto un castaño iba con ellos, se había negado rotundamente a quedarse y, si no fuera por su necedad lo hubieran obligado. Su hermana y amigo Daniel iban acompañándolo.

Habían recibido un llamado informando que una mujer gritaba en aquel sitio pero los testigos no quisieron hacer acercarse por miedo o como Louis pensaba por no exponer sus vidas.

Rodearon la construcción, todo la organización dirigida por Liam tenia armamento y contaba con ordenes de ejecutar a los secuestrados en dado caso que estos hicieran un movimiento agresivo.

Louis sentía el corazón salirse del pecho, dónde diablos estaba su rizado cuando se necesitaba. Él había salido desde anoche donde fue la última vez que vio a Harry.

Subieron cautelosamente hacia la parte superior de la construcción donde el grito desgarrador de una mujer seguida de un grito masculino inundaron la construcción. Louis, a pesar de que Liam se lo había negado, subió corriendo las escaleras sin pensar en usar el elevador o algún otro método para subir.