"¿Cuánto tiempo soporta un corazón antes de despedazarse? Los recuerdos pueden corrompernos, las emociones nublan nuestro juicio, es difícil saber el momento exacto en el que comienzas a cambiar quién eres. La muerte me otorgo alas y bondad en mi n...
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Sobre mi cabeza, nubes oscuras se aglomeran ocultando a las estrellas y a la luna, el viento gime y se arremolina a mi alrededor, palabras escritas con brisas violentas se incrustan en mi piel, anunciando a la tormenta. Un sendero brillante se abre paso en medio de la oscuridad y poco después, la voz ensordecedora de la tempestad sacude la ciudad sumergida por kilómetros de un cielo tormentoso.
Gotas heladas de agua cristalina caen sobre mí y amenazan con arrastrarme hacia abajo, donde cada una se rompe contra el pavimento.
—Lo encontré —el edificio se sacude, la aparatosa caída de Josten es opacada por la impetuosidad del viento.
—¿Dónde? —me rehusó a mirarlo a la cara para ser testigo de su sonrisa de superioridad. En su lugar solo percibo que se encoge de hombros a mi lado.
—Te lo diré solo si dices la palabra mágica —falsa despreocupación es lo único que veo, Josten se oculta bajo una máscara de diversión e ignorancia que ha comenzado a enfurecerme.
—No tenemos tiempo para esto.
—Esas son 5 palabras —mi mirada se dispara hacia él, espero ver su despreciable expresión fingida, pero en su lugar veo los pedazos de lo que alguna vez fue su intento de sobreponerse a la situación.
Sus ojos azules están ensombrecidos por un desasosiego que lo sobrepasa, sus labios están apretados en una sonrisa forzada... su rostro entero lucha contra la inevitable ruptura de su serenidad.
—¿Por favor? —verlo de esa forma es mucho más insoportable que verlo fingir.
Josten se percata de mi inútil intento de seguirle el juego y aparta la vista de golpe.
—Adivinaste —ambos sabemos que no existía la dichosa palabra mágica.
—Seguí el rastro a través de numerosas calles aglomeradas, fue difícil bajo tantos aromas distintos, pero al final logre encontrarlo a un par de cuadras, un bar exclusivo, pocas personas, el lugar perfecto —bajo la formalidad de su tono me siento un poco más cómodo.
—Andando —Josten asiente y emprendemos el vuelo sobre París, el hecho de estar viajando de un lado a otro, es agotador, las búsquedas cada vez se tornan más complicadas, siempre quise conocer el mundo de cerca, pero jamás imagine que mi forma de hacerlo implicaría que el peso de una creciente preocupación por la chica que ame en el pasado me seguiría a todos lados.
