A medida que avanzamos, alguien me da una taza roja. Incluso el olor del alcohol, me da dolores de cabeza.
—Tómalo— le digo a Claire y le dan uno a ella.
Esta casa está llena de gente. La cantidad es más de lo que podía imaginar cuando yo estaba de pie delante del guardia de negro. La música y la gente borracha está por toda la habitación. Trato de seguir a Claire y mis ojos captan todo lo que no debo ver. Chicas están bailando sobre las mesas, se quitan la ropa quedando casi desnudas y perdidas de conciencia. Empujo a Claire y corro a la chica en el suelo inmediatamente.
—¡Fuera, apártense de ella!— le grito de la gente, tratando de quitar la basura para que ella pueda respirar.
—Ella necesita aire— grito aún más fuerte. Todo el mundo se calla y hasta la música se apaga. No puedo darme cuenta de como, pero yo instintivamente empiezo a hacerle respiración boca a boca. Oigo voces detrás de mí, como “aww”
—es lesbiana?
—Qué carajo está haciendo?
Y así sucesivamente, pero estoy haciendo mi trabajo, quiero decir que estoy tratando de “recuperarla” No me importa lo que diga la gente. Yo no esperaba ver a la gente de aquí desarrolladas intelectualmente de todos modos.
En algunos segundos, la chica abre los ojos y empieza a toser. Me levanto y nerviosa miro a la gente a mi alrededor... ahora. Realmente me preocupa la gente, pensando que soy lesbiana.
En 5 segundos, se dan cuenta de lo que acabo de hacer y empiezan a aplaudir y silbar. Sonrío tímidamente y mis ojos están buscando a Claire, pero ella no está aquí.
—Gracias por salvar a mi novia— una chica alta con el pelo verde me dice. Su sonrisa parece honesta. ¿Novia? ¿Acabo de “besar” a una lesbiana?
—Oh...— digo con una sonrisa— Son bienvenidas.
—No— oigo la risa de Claire de nuevo y veo cómo ella salta en la piscina con un chico desconocido.
¿Qué coño está haciendo? Estoy en estado de shock, yo trato de analizar en mi mente que mierda pasó, pero yo no puedo hacer nada. Mi boca se forma en “o” cuando veo como Claire se besa con el chico en la piscina.
—Ella es caliente— oigo una voz desconocida detrás de mí.
Me vuelvo y veo a un chico alto, con el pelo rizado y profundos ojos verdes mirándome.
—Hola, preciosa— sonríe.
—H...hey— no sé por qué, pero en serio estoy confundida.
—Supongo que, esta es tu primera vez aquí— sigue hablando... con esa adorable sonrisa.
—Sí...— contesto.
—Tienes que alejarte— dice y se acerca a mí. No tengo idea de lo que está haciendo, pero no tengo tiempo para darme cuenta. Me agarra y tira de mí a su lado en cuestión de segundos. Mi corazón comienza a latir más rápido que nunca, siento su piel sobre la mía y me pongo a temblar...