¿Por qué mi? (Miraculous Ladybug)

Una charla romántica

Bueno, la pena ya pasó y con todo lo demás también se fue. Mis sentimientos por Adrien, la cosa es que por ahora esos pensamientos románticos y los besos con la almohada no eran muy adecuados. También yo rogaba, rezaba, hice de todo para que en mucho tiempo mas París no tenga peligro.

-Marinette, ya te dije que Adrien no es Chat Noir, aunque tienen en leve parecido pero no, como tu mismas dices " es imposible".- dijo Tikki.

-Si, yo se pero imagínate. ¿Qué pasaría si realmente el fuera el, o el fuera el pero de otro...? ¡YA NO SOPORTO MAS!- grité con todas mis fuerzas, por suerte mis padres no estaban en casa.

-¿Qué pasaría si realmente Adrien es Chat, o que pasaría si Adrien fuera Adrien y Chat, Chat?

-Mmmm...- sonido pensativo- Bueno pues sería mucho mejor si Adrien y Chat fueron ellos, osea en resumen volver a la realidad, pero si Chat es Adrien, bueno pues ahí si que las cosas están mal. Cuando salváramos París yo sabría su identidad pero el no la mía, no se.

Se escuchó el timbre de la puerta, tuve que ir abrir.

-Tikki, escóndete, lo mas probable es que sea Alya y que la deje pasar.

Fui a la puerta, vi la manilla y la toqué con mi mano, estaba apunto de girarla hasta que escuche una tos, una tos que me parecía muy familiar. Era una linda y tierna tos, lo cual era evidente que era Adrien. No atiné a hacer nada, solo me mantuve ahí, parada paralizada.

Toc, Toc, Ding, Dong. Se escucho.

-¿Hola? ¿Alguien esta en casa? ¿Marinette?

-Emmm- no se como o de donde salieron las palabras que salieron de mi boca, ya que yo estaba muy nerviosa y tensa.- Si, ¿que pasa Adrien? Cuéntame. ¿Quieres pasar?

-Si, me encantaría- entró a mi casa, quien lo iva a pensar Adrien Agreste esta entrando a mi casa y no por un trabajo de la escuela.- Bueno, es que cuando te fuiste del colegio te vi un poco rara.

-Tranquilo....

-Shh...-me interrumpe Adrien- Ya oí esta historia, ¿por qué no me querías abrir la puerta? Estabas nerviosa, ¿no cierto?

-Bueno...pues tengo que ser sincera, si, estaba muy nerviosa.- respondí.

-¿Y por qué?

-Pues...Yo...Solo...- no podía decir palabras con coherencia o con sentido, estaba que se me salia el corazón por la boca, o incluso por otra parte, las mariposas en el estomago eran millones.

-¿Te gusto?- se escucho un leve susurro de el pronunciando esas palabras, se me paró el corazón.

-¿Qué?-pregunté

-Marinette, te pregunté si es que yo te gusto, ¿es verdad?- A el también se le notaba mucho el nerviosismo, igual que a mi.

-Ehh...Ehhh...¿Por qué insinúas eso?-Tartamudeé

-Lo creo porque siempre cuando te veo hablando con Alya estas de una forma muy divertida, que a la vista parece muy agradable, pero yo me acerco a ti y apenas puedes hablar, me pareces linda....

-¿Qué dijiste?- interrumpí.

-Qué me pareces linda.-dijo Adrien con sinceridad. 

-A ti te gusto, porque la verdad es que a mi...A...Mi...Pues...Si. Listo, ya lo dije, me siento libre, pero esa es la verdad Adrien, me gustas, lo admito. ¿Y tu? ¿Quien es la afortunada de estar en tu corazón? ¿Chloe?.

-La verdad es que no- afirmo, yo lo mire con sorpresa.

-La verdad es que yo siempre te veo con Chloe y ustedes siempre se ven con caras de enamorados, especialmente Chloe.- dije haciéndome un poco la victima, aunque en verdad me sentia una victima.

-Exacto, lo que tu dices es Chloe, ella esta loca por mi y yo no entiendo porque. ¿Que me ven todas las chicas? Si yo solo soy un chico común y corriente que ni siquiera puede hablar con su propio papá.- dijo Adrien muy apenado.

-¿E...eso es enserio? Lo de tu padre.

-Si, la cosa es ¿que es lo que me ven toda las chicas, a todas les atraigo excepto a mi querida...? Nada, nada.

-Bueno, eres asombroso, eres lindo, sabes, no hay palabras en este mundo para explicar lo que siento por ti. Se siente bien decirte esto a ti, a Adrien en personas y no a un libro.

-Gracias, en serio me alagas. ¿Te puedo hacer una pregunta un poco privada?

-Pues...-me puse muy intranquila.- Si.

-Esto es mas difícil preguntar que responder. ¿En que momento te enamoraste de mi?

Me quede tan sorprendida con esa pregunta, me quede unos momentos jugueteando con mis pulseras que tenia en mi brazo, el con cara de desesperación y yo de angustia. Después de unos minutos el atinó y me puso su mano en la mía dando señal para tranquilizarme.

-De...Cuando...Llegaste a la escuela...Y el...El paraguas.

-Tranquila. Yo se por lo que estas pasando, yo se que es difícil y que tu corazón esta que explota. Pues, yo también estoy profundamente enamorado.

A mi ya me estaban saliendo las lagrimas y con esos los mocos, yo muerta de vergüenza.

-Y...¿Se puede saber quien?- pregunte con sonido gangoso en la garganta.

-Claro, yo se que suena ridículo, pero me encanta...Es...Su....

-Tranquilo, es mi turno de tranquilizarte, ya que aqui hay una amiga que te quiere escuchar, porque ella sabe que te quieres desahogar de todo lo que tiene en su corazón.-dije, siento que soné muy como psicóloga.

-Gracias-exclamó, a Adrien también tenia algunas lagrimas ya derramándose de sus bellos, grandes y verdes ojos.- Bueno pues realmente no se su nombre real, pero su nombre es Ladybug.

En ese momento quede anonadada, a Adrien le gusto pero el no sabe que soy yo, para mi oir eso fue como recibir una bomba nuclear encima de todo mi cuerpo y la parte mas pesada cayera en mi corazón, en la parte mas afectadas de todas.

-RING, RING- Sonó la alarma del celular de Adrien indicando que en 5 minutos le tocaba su clase de chino.- Me tengo que ir Marinette, un gusto hablar contigo, me sirvo de mucho, es primera vez que puedo decir que tengo una amiga que le importo realmente y no por mi dinero, gracias.

-De...De...Denada.-Lo acompañe a la puerta mientras yo seguía sin reaccionar.

Fui a buscar la llave de la puerta para abrirla, en ese momento me dí un pellizco lo ual no cambio nada de la realidad y un sueño. Las encontré y fui donde el, donde la puerta. Abrí la puerta.

-No sabes lo bien que me siento, este rato que pase contigo a sido uno de los mejores, lo necesitaba.-me agradeció-Mmm...Mmmm...Te...Te...Quiero Marinette. 

Fueron las palabras mas lindas que el me a dicho, lo único que atiné a hacer fue a darle un beso en la frente de demostración de afecto, cariño y amor que yo le tengo. Pero accidentalmente con la alfombra para limpiarse los pies me tropecé. Me caí encima de sus brazos, el me sostuvo, se puede decir que para mi fue un momento muy romántico y mi ser interior dijo, dale un beso. No quería que ese momento acabara entonces para aprovecharlo mas lo que hice fue....