1: ONLY IN DREAMS.

776 115 45
                                    

La gente siempre me dijo que cada noche sueño algo, sólo que al amanecer no lo recuerdo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La gente siempre me dijo que cada noche sueño algo, sólo que al amanecer no lo recuerdo. Bueno, desde que yo tengo memoria todos mis sueños fueron diferentes a los de los demás.

Cuando tenía cinco años soñé que mi padre moría en el vuelo a Londres que tomaba esa misma tarde, así que lloré y le rogué a mi padre que se quedara conmigo. Por ser el único hijo varón que tiene me hizo caso y en las noticias de la noche salió la nota del vuelo que se había desplomado con destino a Londres.

Ese día mi familia supo que yo era especial.

No soñaba diario con accidentes, algunas veces sólo veía situaciones como el compromiso de alguien que no conocía o el embarazo de un familiar.

A los 8 años las cosas cambiaron.

Después de soñar el divorcio de mis padres, de ver como se iban a gritar y hasta los zapatos se lanzaban a la cabeza del otro desperté por el dolor en mi frente de un zapato de mi madre que me había despertado.

Ese día las cosas cambiaron para todos.

Mi hermana Yoora y mi madre se fueron a vivir a casa de la abuela, mientras que mi padre y yo nos quedamos en un departamento lejos de la ciudad en un bello pueblo llamado "Villa verde" donde todos se conocían y las noticias sobraban.

A mis ocho años corría con gallinas, vacas, burros y muchos animalitos que había en la granja que mi padre formó.

Vendiamos quesos, huevos y hasta leche. Todo pintaba bien, pero los sueños seguían presentes.

Soñaba con la gente conociéndose, comprando su casa, limpiando un asesinato... entonces decidí volverme un power ranger muy a mi estilo.

Cuando soñaba con accidentes de vehículos corría con los policías para decirles que fueran a ver los lugares donde estos ocurrían y pudieran hacer algo, tenía sólo 8 años así que mucho no podía hacer.

Salvé la vida de alguna gente, otros no podía porque la gente me ignoraba o me tiraba de loco o un niño que veía mucha televisión.

Yo ni siquiera tenía una televisión...

Con el poco dinero que me daba mi padre para gastarme en dulces, lo que me daba una vecina por regar sus flores y otras por comprarles el mandado logré comprarme una bicicleta cuando cumplí 10 años.

El problema era aprender a andar en ella, porque no tenía ruedas entrenadoras.

Fue cuando conocí a Joy.

Joy era la hija menor de una familia de 5 hijos que tenía 8 años y era medio agresiva, yo le decía Joytweiler, por los perros rottweiler. Ella se enojaba y me perseguía por el campo mientras me lanzaba piedras.

Joy era una gran amiga, me enseñó a andar en bicicleta y de noche nos íbamos al bosque a subirnos a las ramas de los árboles y ver las estrellas.

La última noche que vi a joy fue cuando soñé como su padre abusaba de ella, como entraba a su recámara y la tocaba mientras ella lloraba. La pulsera que ella usaba de un unicornio cayó al suelo cuando en un acto desesperado por defenderse golpeó el pecho de su padre y él la golpeó para que se callara. Y vi el reloj: 12:35 y la fecha de ese día.

Cuando la pulsera tocó el piso mi sueño terminó.

Corrí con mis calzoncillos de Mazinger Z y mi camiseta blanca hasta la parte trasera donde guardaba mi bicicleta.

Pedaleé por las calles hasta llegar a la casa de joy. Abrí la ventana de la cocina y entré a la casa directo a la habitación de joy, miré antes el reloj de la estancia: 12:37.

Tomé un florero y abrí la puerta escuchando a Joy llorar.

Rompí el jarrón en la cabeza del señor quien enojado intento golpearme, pero el resto de hermanos de Joy llegaron y entré los 6 los golpeamos con lo que encontramos.

Una vecina llamó a la policía, quien llamó a mi padre.

Esa noche todos supieron que el señor Bae había abusado de sus tres hijas: Joy, Irene y Lisa.

La madre de Joy había muerto dos años atrás por hipotermia y ahora ellos iban a vivir con su tío en otro pueblo.

No vi a joy después de esa noche.

Mi vida siguió tranquila, con sueños extraños y metas imposibles.

Cuando por fin cumplí 15 salí de mi pueblo hasta la gran ciudad donde con ayuda de mi padre y mi cerebro pude terminar la preparatoria.

En esa etapa me di cuenta que era gay, porque jamás había visto a las mujeres como algo sexual o sentimental, y me di cuenta de mis gusta una noche

Esa noche soñé con un chico de ojos miel, piel pálida y sonrisa bonita. Traía unas maletas estilo vintage, ropa un poco vieja y una chamarra de mezclilla.

Ese chico se había detenido a alimentar a las palomas con un pan que traía en una bolsa de su pantalón, envuelto en una servilleta de papel.

Un camión que transportaba aves exóticas perdió el control y terminó sobre la banqueta atropellando a aquel muchacho esparciendo las plumas de las aves por todos lados.

El reloj marcaba las doce del día, un periódico señalaba un 12 de septiembre y por el lugar sabía que era el parque cerca de mi casa.

Abrí los ojos viendo una pluma caer, miré mi calendario: 11 de septiembre.

Mañana iba a ser un día algo apresurado.

Y vaya que lo fue.

A las 11:55 salí de mi casa corriendo hasta aquel parque cercano, vi al chico llegar, todo pasó tan rápido.

Corrí hasta tomarlo del brazo, lo jalé lejos de donde pasaría el accidente, aquel chico estaba muy delgado y pude moverlo con facilidad.

No fue como en los cuentos de hadas donde ambos caemos al piso y nos miramos a los ojos enamorandonos al instante.

El camión chocó bañando todo en plumas de colores, aquel chico se asustó tanto que brincó sobre mi directo a mis brazos.

Sus bracitos me rodearon el cuello, su cuerpo temblaba y encajaba perfectamente en mi.

Su nombre es Luhan, y había venido de China con el sueño de volverse un gran cantante, pero primero terminaría su escuela.

Yo necesitaba un compañero de piso, él necesitaba un lugar donde vivir, es así como empezó todo, es así como me convertí en un coleccionista de sueños.

Ambos desarrollamos una gran cercanía, incluso nos volvimos mejores amigos y aprendimos a vivir juntos, fue un día que limpiaba mi cuarto que encontré la pluma que me hizo llegar a Luhan que me animé a contarle mi secreto.

Luhan guardó la pluma en un frasco colocandola sobre una repisa.

Cada mañana le contaba los sueños y él guardaba los objetos en frascos sobre la estantería.

Así pasaron bastantes años, y era lógico que mis sentimientos salieran disparados enamorandose de él, pero lo que no esperaba era que el destino tuviera otra cosa planeada para mi

COLECCIONISTA DE SUEÑOS  || CHANBAEKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora