Reset [Otayuuri]

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—Joven Katsuki. ¿Se puede saber la razón por la que no esta atendiendo?— después de aquello las risas de algunos de los presentes resonó en el aula, logrando que el mencionado se encogiera y murmura una pequeña disculpa al profesor por no estar atendiendo. — Espero que no vuelva a pasar.

Yuuri solo vio que su maestro volteo a seguir la clase. Decidió hacer caso a su advertencia y trato de tomar atención. Después de algunos minutos decidió rendirse y volver a invertir su tiempo en mirar por la ventana al salón que se encontraba realizando gimnasia.

Justo cuando se disponía a hacerlo un golpe en su cabeza lo detuvo. Llevo su mano derecha a la zona del golpe mientras que escuchaba una risa baja de su compañero de atrás.

—¿Nunca aprendes verdad?

—Oh. Callate que tu estas peor que yo. Te voy a denunciar por maltrato — se quejo mientras aun sobaba su cabeza y hacia un pequeño puchero.

—No dramatices. E visto que te has dado golpeos peores patinando así que deja eso. —cuando término de decir aquello la campana había sonado y el profesor se apresuró a indicar las actividades que deberían realizar en sus hogares. — ¿Nos vamos?

—¿Adonde quieres ir? No mencionaste nada ayer.

—Aveces pienso que sufres de alzheimer. Si te lo dije...— se levanto de su lugar tomando sus cosas y empezó a caminar para salir del salón.

Yuuri al ver la acción de su amigo se apresuró a seguirlo. Se lamentaba mentalmente ser tan olvidadizo. Solo esperaba que Otabek no estuviera tan enojado.

—Lo siento mucho Ota. Sabes que soy así y no es algo que pueda evitar. —dijo la misma excusa que siempre usaba para ese tipo de problemas. —No te amargues por favor...

El kazajo al escucharlo se detuvo provocando que Yuuri chocara con su espalda— Tú sabes que es muy difícil que me amargue contigo Yuuri. No te preocupes se lo olvidadizo que puedes llegar a ser.

—Me alegro —suspiro. Amaba que Otabek lo comprendiera aunque aveces sabia que se aprovechaba mucho de ello. —Con respecto a mi pregunta... ¿A donde exactamente íbamos a ir?

—A la feria de antigüedades. Tengo que conseguir un regalo para mi madre y creo que sera el lugar perfecto para comprarlo. ¿Me vas a acompañar o no?

—Si...

Cuando afirme que lo acompañaría, reanudó la caminata. Hace mucho tiempo no salía con mi mejor amigo así que seria bueno que lo acompañase.

Empezamos a hablar sobre algunos temas distintos mientras avanzábamos por los pasillos de la facultad. Este era nuestro último año en la universidad. Realmente no se como pasó tan rápido el tiempo y me causa un poco de nostalgia recordar todo lo que hemos pasado desde que nos conocimos. Suspiro y veo como Otabek voltea en mi dirección preguntándome que me pasaba, a lo que yo respondí con un simple bien y me apresuré a cambiar de tema. No me gustaba que me viera débil.

Cuando estábamos en el estacionamiento de la universidad. Alguien al parecer empezó a llamarme. Cuando vi a la persona que lo hacia no pude evitar sonrojarme, pero no me percate de cierta molestia que expresaba la mirada de mi amigo.

—Yuuri~ —cuando estuvo cerca de mi me abrazo sin descaro alguno. Viktor era una persona muy afectiva, pero aún no me acostumbraba a ello a pesar de que aya pasado unos meses desde que me pidió ser su novio.— ¿A dónde crees que vas mi cerdito?

—¡Viktor! Te dije que no me digieras así en público —queria usar mis manos para tapar mi cara, la cual seguramente estaría más roja que nunca, pero Viktor no me lo permitió ya que aún me tenia abrasado.