II

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¿Qué es lo que pasa pequeño? – dijo Andrómeda, al ver el ceño fruncido en la pequeña frente.

Daven es malo – haciendo un puchero – no quiero seguir escuchando- mientras se acurrucaba mas en el regazo del mayor

Sabes, en efecto, Daven no fue bueno con Caleb al principio, pero recuerda que él tenía mucho viviendo solo en el bosque, así que no sabía cómo hacer amigos-

Eso es fácil dada, todos saben cómo hacer un amigo – respondió certero Calipso

Andrómeda sonrío, su niño era tan inteligente- Daven nunca había tenido un amigo antes, así que no sabía cómo acercarse a Caleb, además te aseguro que todo mejorara pronto

El niño no parecía muy convencido, pero finalmente dijo – Le daré solo una oportunidad más

Eso es más que suficiente pequeño -

-♦♦♦-

Daven veía dormir al consentido príncipe, parecía que las fuerzas lo habían abandonado rápidamente; él fue un poco culpable en eso, le había gastado un sinfín de bromas durante todo el día, lo único malo de eso fue que su madre; que paso hablándole al oído en todo ese tiempo; se acerco mas y pudo apreciar mejor al joven ( el también era joven en términos de un dios o un espíritu del bosque); aprecio el rostro suave – rio por lo bajo, para no despertar al chico – pero tenía rasgos muy suaves para un hombre, cabello hermoso, y con buen físico, se notaba que hacia cierta cantidad de ejercicio, le gustaba, se sentía tentado a tocarlo.

Pero se sentía melancólico, el chico tenía una expresión triste en el rostro, de alguien que ha pasado solo por mucho tiempo, el conocía ese sentimiento, era lo mismo que él sentía desde hace mas de cien años cuando su madre y padre, lo dejaron en la tierra.

Caleb comenzó a moverse un poco, y Daven supo que era hora de irse, bueno no lejos, seguiría vigilando al príncipe, posiblemente le jugaría un par de bromas más cuando despertara, pero por hoy necesitaba descansar.

El bosque es un lugar encantado, lleno de magia, hermosos paisajes, ninfas, elfos, todo tipo de criaturas fantásticas; pero también había las peligrosas, por lo menos los sátiros, no eran my agradables con los humanos, al igual que los centauros, etc.; pero había una entidad a la cual ni siquiera a los espíritus les gustaba mencionar. Aun Daven, había sido advertido de alejarse de esa entidad.

-♦♦♦-

Caleb... Caleb – Escuchaba que lo llamaban a lo lejos y esa voz sonaba tan hermosa, le era tan familiar

Caleb... ven mi pequeño...

Mamá – susurro todavía entre sueños el príncipe –

Caleb... ven mi pequeñito – la voz en el viento, era insistente, y tenebrosa, para los oídos de cualquier persona, que no estuviera en el trance espectral.

El príncipe abrió los ojos, seguía escuchando la voz de su madre, no era un sueño – Caleb – si era ella, era su madre, no podría confundirla nunca; camino apresurado hacia donde provenía la voz – Ya voy mama

Daven...

Daven mi amor despierta-

Daven despierta –

Mamá, basta déjame dormir en paz – dijo el espíritu de cabello azul, acurrucándose más, entre las hojas en las que descansaba – Tu príncipe está en peligro amor.

Un cuento para Calipso #FS2017Where stories live. Discover now