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Me siento extrañamente identificado con las historias donde el protagonista es un completo idiota por así decirlo, mas que nada a lo impulsivos que llegan a ser, en especial en aquellas escenas donde toman decisiones erróneas cuando esta claramente les saldrán consecuencias.

Suspiro mientras pienso como presentarme a la audiencia que me esta leyendo en estos instantes, no quiero comenzar con el típico cliché de "hola, mi nombre es..." ya que me parece sumamente predecible y básico. Dejando de lado ello me encuentro observando el televisor con una mueca de seriedad pensando en lo cringeoso que he llegado a ser con algunas personas que conozco y pensando "¿como es que llegue a hacer algo como eso?" muriendo de la vergüenza internamente.

─ Demonios ─ exclame para mi mismo mientras ocultaba mi rostro en mis piernas

─ Deberías sentarte en el sofá ─ comentó mi madre aun con su rostro molesto ─ pero claro, como tú no eres el que lava tu ropa ¿cierto?

─ lo lamento ─ hice caso a su ironía levantándome del fresco suelo y sentándome en el cómodo sillón ─ mamá ─ llame su atención de manera instantánea tras mi llamado ─ ¿te ha sucedido alguna vez que te arrepientes de cosas que hiciste en el pasado pero que no puedes cambiar? además de quedarte pensando en ello una y otra vez hasta que la vergüenza te consume y hace que te sientas terrible por ello queriendo olvidarlo pero no pudiendo ya que tu mente no para de darle vueltas a ello ¿o solamente son ideas mías?

─ No ─ fue su simple respuesta ante mi especificada pregunta. Agradecí por su respuesta

que somos...?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora