Simplemente esto.

Capitulo 2.

Las semanas fueron pasando, la primera solo fue para ponernos al corriente, “conocernos” entre nosotros, hablar del plan de estudio que tenían los profesores para este periodo, los exámenes y otras cosas rutinarias.

Me parecía una pérdida de tiempo ir simplemente a hablar de estas cosas, no necesitábamos más que tenerlo por escrito y listo. Podría estar usando este tiempo para otras cosas, dormir, por ejemplo.

Aunque se supone que la primera semana de clases fue para conocernos mejor, en realidad, para conocer mejor a los chicos nuevos, digo se supone porque, Harry, en todas las veces que intente empezar una charla o, simplemente me ignora o da una respuesta cortante de no más de tres silabas. La última vez que quise hablarle intente preguntarle cómo le había ido el fin de semana, y lo único que hizo fue voltearse para el lado contrario ignorándome magistralmente.

-Es todo. Nunca más –Puse mi bandeja de comida sobre la mesa –No volveré a tratar de tener una conversación con ese chico. Jamás.

-Solo cálmate, tal vez es… ¿tímido? –Frunció los labios levemente.

-¿Tímido? –Me mofe –Es un grosero. No sé quien se cree.

-Solo ignóralo, si no quiere hablarte, hey, está bien. Él se lo pierde.

Bufe –Bueno, al parecer a la única que no soporta es a mí –Issa siguió mi mirada hasta la mesa en la que se sentaba normalmente junto a Niall. Kendra, nuestra Capitana-zorra-de-porristas, todo instituto que se respete tiene una, y nosotros la tenemos a ella, estaba batiendo sus pestañas hacia Harry que estaba sentado a su lado, frente a él esta Niall, con su chaqueta del equipo, habían otras tres chicas, y solo dos más pertenecientes al equipo. Harry dijo algo, Niall y Kendra rieron, ella puso su mano en su hombro, pero él no la aparto.

-Deja de mirarlos así –Dijo Issa, con la boca medio llena de pizza de lunes. –Creo que podrías atravesarlos ahora mismo.

-No entiendo qué le ven todos los chicos –Tome un sorbo de mi jugo de caja sabor mandarina.

-Creo que ya sabemos que le ven –Issa inflo el pecho mientras lo decía, haciendo que su busto se viera más grande. No pude evitar reír. –Pero si te hace sentir mejor, a mí tampoco me habla. Lo salude el otro día y solo me dio un asentimiento de cabeza.

-Como sea, ya no me preocupare por esto. Solo debo aguantar todo un año ¿qué tan difícil debe ser?

Ya había pasado un mes y medio desde que entramos, los trabajos se estaban haciendo cada vez más exigentes, era el último año, y no podíamos permitir suspender alguna materia.

Ya había dejado de intentar hacerme amiga de Harry, o por lo menos tener una conversación decente.

Cada uno llegaba en silencio y se iba en silencio, no cruzábamos palabra salvo para química, donde tenemos que trabajar juntos pocas veces en la semana. Hace su parte y yo la mía.

Aunque debo confesar que, a veces me quedaba viendo su perfil, mientras él estaba perdido en la clase, en algunas ocasiones se había dado cuenta y centrado sus ojos en mí, y yo, obviamente, miraba a otro lado y volvía a prestar atención al profesor. Nunca paso de una mirada, nunca me dijo nada sobre ello. Pero gracias a esas veces me había dado cuenta que sus ojos eran verdes, tenían un brillo singular.

-Buenos días alumnos –El profesor Cassio entro al salón, vistiendo su usual bata blanca abierta. Unos “Buenos días” se escucharon como de costumbre. Este se acerco al tablero, sacando un marcador de uno de los bolsillos de su pantalón –Hoy profundizaremos en… -Escribió, en una de las esquinas del tablero. –Energía.  ¿qué es la energía?, ¿señor Leif? –Señalo a un chico en la fila de atrás.

-Ahm, es la capacidad de hacer algún ¿trabajo?

-Uhmm es una propiedad que le permite a cualquier objeto físico realizar algún trabajo, sí. No esta tan alejado. A decir verdad, En física, “energía” se define como eso. Pero, sabiendo esto, ¿por qué es importante la energía entonces? –Levante mi mano.

-La energía es una propiedad que le permite a cualquier objeto físico realizar algún trabajo. –Hice un gesto con mi mano –Todas las transformaciones que puede percibir el hombre de la naturaleza son producto de algún tipo de energía.

-Muy bien –Sonrió –Ahora, ¿qué ejemplos podrían darme?, teniendo en cuenta lo que acaba de decir la señorita Moore.

- ¿Derretimiento de un hielo? –Dijo alguien.

-Exacto. En física, los diversos tipos de movimientos se les atribuyen a un tipo de energía, como la energía potencial, cinética, electromagnética, entre otras. Éstas están en potencia de transformación a otro tipo de energía.

-No entiendo –Esta fue Issa, física nunca fue su fuerte.

-Por ejemplo una ampolleta –La voz de Harry mando un corrientazo por mi cuello.

-Sí, termine la idea por favor –El profesor lo alentó.

-Encendida en poco tiempo comenzará a calentarse, -Se encogió de hombros –esto se entiende, pues la ampolleta experimenta la transformación de la energía eléctrica a energía calórica.

-De ahí la famosa frase de Newton “la energía no se crea ni se destruye, sólo se transforma” –Las palabras salieron casi por inercia, mire al profesor y después a Harry.

-Es correcto. Buen ejemplo señor Styles. Señoría Moore. –Nos dedico un asentimiento en recompensa –Hacen un buen equipo –Le di una mirada rápida a Harry, y casi, casi podría decir que había visto una pequeña sonrisa

Pasamos el resto de la clase hablando sobre como La física otorga distintas clasificaciones de energía y sus derivados.

Me gusta esta clase, no era una experta, pero el profesor Cassio era casi un genio, y su método de enseñanza era muy eficaz. Era fácil entender algunos conceptos en una clase, que de otra forma nos hubiéramos tardados más. También era paciente con los que no eran muy buenos, siempre nos decía que cada cual tenía fuertes, en lo que era más bueno y se desenvolvía mejor, pero que solo porque las otras cuesten un poco más no significa que sean imposibles, recuerdo una frase que dijo una vez, “si juzgas la inteligencia de un pez por su capacidad de trepar árboles, siempre pensaras que es tonto." y se me quedo grabada desde entonces