Tic Tac

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Julián tenía que tomar una decisión. El problema surgía en que no tenía ni idea de qué camino escoger. Era como estar perdido en un laberinto de paredes grises, bajo un cielo sin estrellas y siendo perseguido por una sombra incansable.

La elección que debía llevar a cabo no era otra que la de su propio futuro.


El camino de la izquierda era una boca de lobo oscura y sin fin visible. ¿Debería seguir sus deseos y elegir su vocación como forma de vida, aunque eso significase una situación de permanente inestabilidad? Si caminaba a ciegas por ese fino sendero tendría muchas posibilidades de caer y no salir jamás del abismo. Fracasar.

El camino de la derecha era una aburrida línea recta bien iluminada. ¿Tener un trabajo que no le gustaba sólo por el hecho de que necesitaba dinero? ¿Desperdiciar su vida entera en algo que no le llenaba?

Julián era incapaz de decidirse y la sombra avanzaba inexorable. Lo alcanzó con sus garras de agujas y lentamente lo hizo pedazos, mientras el chico seguía parado en la encrucijada, justo al borde del abismo en el que sus sueños yacían, tan destruidos como él.

Dio un paso.


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⏰ Última actualización: Apr 28, 2017 ⏰

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