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Una hora.

Jisoo llevaba una hora​ corriendo y sentía que en cualquier momento se desvanecería en ese parque.

El sudor callendo por su rostro, su respiración acelerada, el corazón a mil por hora y una sed que necesitaba saciar.

Se sentó en una banca del parque y tomo agua de la botella que llevaba con ella.

Vió su reloj, después a su alrededor, y se empezó a preguntar ¿por qué estaba corriendo a las 6:47am en lugar de estar dormida en su cama?

La respuesta: su novia, Jennie Kim.

En la última cita que tuvieron Jennie comentó que Jisoo era muy perezosa y también mencionó que admira a las personas que se esfuerzan por alcanzar sus metas y que también lo hacen por sus seres queridos, ésta última se ofendió y a la vez le dió pena, así que decidió demostrarle que ella también podía esforzarse un poco más, pero no sólo corriendo, si no también se ha hecho más responsable tanto en la universidad como en su departamento el cual comparte con su mejor amiga, Lalisa Manoban.

Jennie había salido de viaje, llevaba una semana desde que se fué y faltaba una semana más para su regreso.

Jisoo quería sorprenderla cuando regresara demostrándole cuánto se esfuerza por ser una persona mejor para Jennie.

Sus pensamientos fueron interrumpidos ya que sintió cosquillas en su mano. Vió hacia abajo y pudo ver un pequeño cachorrito lamiendo sus dedos.

En cuanto lo vió se enamoró (no tanto como de Jennie) y se puso a jugar con él.

Pasaron unos minutos y decidió revisar la hora.

Salió corriendo al darse cuenta de que eran las 7:03 ya que llegaría tarde a la universidad, pero segundos después regresó, tomo al cachorro en sus manos y volvió a correr.

Una vez que llegó a su departamento entró tratando de no hacer ruido ya que lo más seguro es que la idea de tener un perrito no era del agrado de Lalisa.

Intentó llegar a su habitación fallando por completo.

- ¿Jisoo unnie? ¿en dónde estábas?

- Ah Lisa, hola ehh fui a correr.

Le contestó dándole la espalda, se notaba por su tono de voz que estaba nerviosa.

La rubia empezó a soltar carcajadas y después de un tiempo puso sus manos en su abdomen ya que le dolía de tanto reír.

Jisoo obviamente se enojo

- ¿Qué es tan gracioso?

- Tú

La rubia calmó su risa.

- Perdón jaja, es que no te imagino a ti, levantandote temprano... sólo para salir a correr.

- Pues para tu información llevo haciéndolo toda ésta semana y las personas cambian y ahora lo hago y soy mucho más responsable y y y... te lo voy a demostrar.

- ¿Ah si? ¿Cómo?

La pelinegra se dió la vuelta dejando ver al cachorrito.

- Su nombre es Dalgom

- ¡¿Qué?! Nononononononono y NO. No podemos tener mascotas aquí, los dueños del departamento nos lo dejaron bien claro; a parte, ¿qué tal si tiene dueño? Lo ha de estar buscando.

- Pero si lo ocultamos bien no se darán cuenta y no tiene collar. Además míralo, está muy sucio se vé que lleva días en la calle y no he visto anuncios preguntando por él.

- No podemos quedarnos con él. No quiero tener problemas ni que cause destrozos.

- No causará destrozos, lo prometo, míralo, es un amoooor.

Después de un rato discutiendo, Lisa aceptó que se quedara, con la condición de que no causara problemas.

- Al primer desastre que haga se va.

Jisoo aceptó sus condiciones.

Salieron corriendo de su departamento ya que a las dos se les había hecho muy tarde para llegar a la universidad.

Thank you Dalgom ✒ Chaelisa ‹‹FINALIZADA››Donde viven las historias. Descúbrelo ahora