Piano Tiles || Jeon Jungkook

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Regresaba a Corea después de mucho tiempo.  Lo triste es que no regresaría a Busan,  el lugar donde nací.

Hace poco mas de  10 años que no pisaba mi país, primero por que mi papá había recibido una oferta de trabajo mejor en los Estados Unidos y aunque había prometido que regresariamos juntos eso nunca sucedio. El murió antes de poder regresar. Después de su muerte había quedado sola... Mi madre habia muerto hace 15 años, había quedado huérfana de la nada. Perdí todo lo que quería.

Pase cerca de un año en la casa hogar cerca del barrio coreano en Los Ángeles,  hasta que una familia que nunca pudo tener hijos llego para llevarme.

Mi pregunta en su momento fue,  ¿por que yo y no un bebé? Ellos me contestaron que solo querían una hija,  no importaba la edad que tuviera, me amaran de todas formas.

Desde entonces nadie me llamaba Kang MiRae, ahora mi nombre era Yoo MiRae.  Había pedido a mis padres que conservaramos mi nombre, para que pudiera recordar a mi antigua familia.

Y ahora estoy llegando de nuevo a Corea. Siempre habia querido vivir en Seúl, pero mi padre amaba el mar, así que eso nunca paso. Y ahora estaba aqui para quedarme.

Lo único que me faltaba era él. Pero dudaba que el me recordará;  y si lo hacía... Seguramente me odiaba. Solamente le escribí dos veces cuando estuve en Estados Unidos.

-¿Estas nerviosa cariño? - mi madre preguntó interrumpiendo mi monólogo interno.

-Un poco,  ha pasado mucho tiempo- ella me acaricio la cabeza y me dio un beso en la cien.

-Te acoplaras rápido - dijo para regresar a su asiento.

La parte del avión rn la que ibamos estaba prácticamente vacia,  y es que llenar primera clase en un avión no siempre era posible.

Viajábamos así por que la empresa para la que trabajaba mi padre pagaba los gastos,  mas ahora que le pedian regresar a Corea después de llevar con éxito sus negocios en Estados Unidos.

Comencé a sentir que el avión descendía y me aseguré el cinturón de seguridad. Minutos después volvía a pisar el suelo surcoreano.

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Se había hecho tarde mas pronto de lo que esperé, el cambio de horario me estaba pasando factura y aunque eran media noche yo aun no sentía ni una pizca de sueño,  por lo que decidí terminar de desempacar para agotarme mas rápido.

-Mañana saldremos a dar un paseo juntos querida,  duermete ya para que despiertes temprano. -dijo mi madre entrando a mi habitación - tu padre tiene buen gusto. ¿Te gusta?

-Me encanta- era igual de espacioso que mi habitación en América

Mi madre me abrazo y salio de la recámara. Suspire y me deje caer sentada en la orilla de la cama. Me sentía agradecida por que mis padres me eligieran. Era afortunada.

Me levante nuevamente con la finalidad de acomodar las ultimas cosas de la caja que quedaba, en ella había puesto todo lo que iba en el escritorio y las mesas de noche. Estaba a punto de terminar,  hasta que saque la ultima cosa que restaba, un marco viejisimo adornaba una fotografía igual de antaña.

Era él. Conmigo, y eramos felices.

Yo Jeon Jungkook te prometo a ti, mi MiRae,  que solo te amaré a ti, que solo jugaré contigo y que nunca te dejaré sola, siempre estaré contigo, te daré todos los dulces que quieras siempre y te comprare muchas muñecas con el dinero que me den los fines de semana. Acepta mis joyas del mar como simbolo de mi amor.- Puso el anillo en mi dedo.

Las lagrimas que había logrado retener en el avión ahora corrían una tras otra sin parar.