La chica de las gafas Verdes

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Duramos horas hablando, cuando me doy cuenta que están por cerrar la feria, casi que nos están sacando, La tomo de la mano y le digo que nos vayamos, que llegará tarde.

- Llegarás muy tarde a tu casa, te acompaño

-No, no tengo nada que hacer allá, ¿podemos seguir por ahí?

Suspiro y le respondo

-¿Estas segura? no quiero que te metas en problemas

Ella se ríe y con un tono sarcástico me responde

-Amigo, estas con una mujer ya

-Oh claro, es que con esa cara de niña que no hace nada.

Se ríe e insiste

-¿Vamos o que?

-Vamos

Empezamos a caminar por toda la avenida, aunque era ya un poco tarde, aun había movimiento en la calle. Conversábamos de cualquier cosa que se nos venía a la mente. Se me ocurrió invitarla a la casa, solo para charlar obviamente, no la quería tener en a calle tan tarde, pero no me atreví, así que le inventé una excusa para llevarla a su casa y ella aceptó. La acompañe hasta la puerta de su edificio y me despedí con un dulce beso en su mejilla y me retiré. Ya a 20 pasos de distancia no pude evitar voltear a ver si ella seguía ahí, y si que seguía y creo que no sabía que la vería porque se tapaba el rostro y no dejaba de sonreír, se dio media vuelta y entró.

Llego a mi casa y me meto de una vez a la ducha con miles de pensamientos, no puedo dejar de pensarla, si antes pensaba mucho en ella, ahora la pienso demasiado. Nunca me había pasado esto con una persona, que en pocos días que la conozco siento que tenemos una historia de hace miles de años, me pregunto si en otra vida tuve algo que ver con ella.

No soy de creer en el destino, no me parece algo real, pero en fin, quizás me siento solo y solo a mi me esté pasando esto.

Salgo de la ducha, me seco y me coloco frente al frente del espejo, está empañado así que con la toalla lo limpio un poco e lo que se pueda ver mi rostro. Noto que aún no se me ha borrado la sonrisa de mi rostro. Ignorando mi cara, me cepillo los dientes y me voy al cuarto.

Tengo  5 mensajes de ella.

MENSAJE DE TEXTO: CAMILA

-Estas?

-Gracias, por la tarde de hoy... Hace mucho que no me divierto como hoy.

-Y lo siento por hablar tanto, normalmente no hablo nada con nadie

-Esteeeee, creo que ya son demasiados mensajes, pero en serio no dejo de sonreír, me sentí cómoda... realmente muy cómoda contigo. Gracias

-Que tengas una linda noche, Dormiré