Cuando los pendej.:#.s se enamoran.

Se traza una nueva historia

Después de la muerte de Alex (mi hermano) me mudé. Esa era la decisión de mamá. Ni ella ni yo queríamos estar ahí después de tantos sucesos, me refiero al que ya conocen y el de papá, que se los contaré mas adelante, aunque extrañaría a mi familia (de parte de mamá obviamente) y mis amigos (Celeste y Margareth más que todo), era mejor alejarnos del pasado que nos atormentaba.

Margareth es mi otra mejor amiga, aunque con ella me conozco poco tiempo llegamos a ser Buenas amigas y las tres (con Celeste) llegamos a formar nuestro propio grupo.

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Mamá hizo el papeleo correspondiente para ir casi a medio año a otra escuela, su decisión fue en esa etapa de los exámenes para terminar el primer bimestre, entonces iba a ser la chica nueva que llegaba tarde a la escuela. Ya que... Por lo menos seré conocida así.

Fue algo difícil, corrijo, fue muy difícil para mi despedirme de Celeste y Margareth, amigas con las que conviví muy bien y que ahora ya no las vería a diario y con las que ya no tendría esas huidas de clases para ir al cine a comer o tomar helados... Fue lo más difícil, más que despedirme de mi familia y eso es extraño ya que se supone que despedirse de la familia duele más, pero así no fue mi caso.

Llegué un sábado en la noche, el vuelo fue largo, mamá descansó pero yo no. Pensé en todo lo que dejaba y como me recibirían en una nueva ciudad, nuevos amigos, nuevas aventuras...

Mi tía Lucy y mi prima Jess fueron a recogernos al aeropuerto. Me llevo muy bien con Jess, al principio no nos llevábamos nada bien, no recuerdo cuando empezamos a llevarnos bien, cero que fue la última vez que vine con Alex cuando empezamos a cocinar juntos, pero lo que cuenta es que ahora somos como la uña y la mugre, así nos dijeron un día y yo no entendí, pero ahora todo tiene sentido. *la sabiduría es poder. XD*

Llegó el lunes, y mi cuerpo lo sabe, ok no, estoy nerviosa, parece que me está dando taquicardia y aumenta con cada tic del reloj.

Mi góndola me recogió 7:30 de la mañana para llegar a la escuela. Lamentablemente fui la ultima en ser recogida, digo lamentablemente porque es divertido saber donde viven las demás personas, pero bueno no me puedo quejar, y menos mi primer día en la nueva escuela.
Llegamos muy temprano para mi gusto, pero creo que era completamente normal.
Mi tío ya estaba en la escuela, ¿Cómo fue que llegó antes? Me dijo que el director o la psicóloga irían a hablar conmigo y que me quedara en la sala de espera de la dirección y luego adivinen...
Me dejó ahí, me sentí como un perro tratando de buscar a su dueño en medio de una manada de elefantes. Lo se, soy un poco dramática pero así funciona mi vida. Y como decía...

Me quedé en la sala un buen rato en la secretaría hasta que vino la psicóloga a darme la bienvenida. Donde descubrí que mi tío se había marchado.. Bueno tal vez tenía otras cosas que hacer.

-Hola hermosa, ¿cual es tu nombre?- la psicóloga parece amable, y me hace entrar a una sala que parece su oficina.

-Soy Emily-esbozo una sonrisa tratando de parecer tranquila y amigable pero parece no dar resultado.

-Tranquila-como si leyera mis pensamientos me dirige un vaso con agua - Se que debe sentirse extraño, pero relájate, ya verás que todos aquí te apoyarémos, cualquier cosa que necesites avísame que estaré acá cuando lo requieras- termino el vaso con agua.

-Umm gr-gracias -¿por qué estoy tartamudeando? -¿Podré dar una vuelta antes de entrar al salón? - pensaba en dar una vuelta y esperar a que de repente acabarán los primeros períodos de clases iguales que en las películas, pero no.

- No creo que se pueda ya que hay muchas actividades que hacer... - soné tan estúpida o me lo imagino. -Te llevaré a tu salón y te mostraré tu casillero -

No me queda de otra que decir que si y muevo la cabeza haciendo un gesto amable. Después de mostrarme mi casillero fui a la primera clase y sentí como el corazón se me saldría en cualquier momento. Ella tocó la puerta y salió un hombre mayor con una cara muy seria y me miró como si fuera un espécimen que jamás haya visto en su vida, me hicieron pasar, me senté al lado de un chico que no emitía ni una palabra. Antes de que mi coxis se apoyará contra la silla una manada de chicas vinieron a mi, sentí que me desmayaría en ese instante, no veía ni un lado por donde salir y empezaron las preguntas...
-¿Cómo te llamas?...
-¿De que escuela vienes?...
-¿Cuántos años tienes?...
-¿Por qué entraste recién?...
-¿De dónde eres?...
Y más preguntas a las cuales mi cerebro no conseguía procesar las respuestas ya que todo parecía un remolino.
El profesor entró y todos volvieron a sus lugares, me preguntó mi nombre y me dio una bienvenida muy seca, no esperaba más de un profesor tan serio. Al parecer estaba pasando biología y el profesor se llamaba Reynolds, Victor Reynolds. El terrible de secundaria.

Llegó el recreo y se me acercó una chica alocada para mi gusto, nada parecido a Celeste o a Margareth, era una de las únicas que no me vio extraño en las anteriores horas de clases, se llama Rackel.

Me estaba enseñando la escuela y pasamos por el patio dónde jugaban algunos chicos y uno de ellos se chocó conmigo, provocando que me cayera, se disculpó, se fue y Rackel me dijo si estaba bien, y le dije que si. No vi quien era el que hizo que me cayera pero bueno, seguí mi camino, me quedé callada el resto del trayecto, Rackel habla y habla, a los minuto siguientes mi muñeca se hizo como una bola de golf literalmente y empezó a doler apenas la movía. Le dije a Rackel que me mostrara la enfermería y me llevó, sonó el timbre de entrada y se fue.

Me quedé ahí y la enfermera dijo que tal vez me rompí la muñeca - genial, mi primer día y ya me rompí la muñeca - me pidió el celular pero recordé que lo dejé en la mochila, me pidió el numero de mamá y la llamó, le dijo lo que había ocurrido.

Me mandó a recoger mis cosas y todos en el salón se preguntaban que me pasó, le dije a Rackel que tal vez me había fracturado y su rostro se formó algo confuso.

Mamá llegó y fuimos a un hospital, pero solo era un centro de salud. Nos mandaron a un hospital, estaba lejos, cuando llegamos me hicieron unos estudios y al final me pusieron una férula *momento filosófico*
(férula: tablilla o molde flexible y resistente que se emplea en el tratamiento de las fracturas para inmovilizar un miembro y mantener el hueso roto o dañado en una posición fija), para los que se hicieron "bolas" (así le digo yo cuando me confundo) la férula es como el yeso pero es más liviano, así que, sí, exacto, Emily Morris se hizo un esguince en la muñeca, algo más podría pasar?

Cuando llegamos al que llamo "hogar temporal", porque con mamá estamos quedándonos en casa me unos tíos mientras buscamos un lugar propio dónde quedarnos, no faltaron las preguntas y los chistes de tío Mario respecto a lo que pasó en mi primer día.

Ni en mis más extraños sueños imaginé que me pasaría algo así, parece que estoy viviendo en una película, que es lo que sigue, que el chico más guapo y popular se enamore de mi y vivamos una historia romántica? No lo creo. Algo así pasó antes y terminó mal. (Les contaré más adelante)

Jess y su novio salieron por lo que yo me dormiré temprano y trataré de olvidar lo que pasó hoy, pero obviamente no será así, es la primera vez que algo así me pasa. Jamás había usado una férula u otra cosa parecía.

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Mis simios evolucionados!!!! Solo quería decir que los quiero, así que sin más preámbulos.... (tambores por favor) prrrrr prrrr prrrr
LOS QUIERO!!!
Fin. Esperaba algo más? Pues no hahaha okey okey otra cosa
LOS AMO!!! esta mejor?
Es que los amo. Bye bye... No se olviden de leer todos los capítulos eh? Los estoy viendo haha :* :* :*