Confuciones [Ruby Rose y Tú]

-7-

Ella me miro y esbozo una sonrisa algo rara.

- Hola ______, tanto tiempo -dijo mirandome en ese momento solo sentí que eramos nosotras dos-

- Ahh ya se conocen? -dijo el productor confundido-

- Si -se limito a responder Ruby- No has leído de que se trata la serie y tu personaje verdad? -me miro y se cruzó de brazos- apuesto que cuando lo lea huira de aquí

- Que te hace pensar que no leí la historia? -la mire desafiante- mi personaje es Sandy Peige, chica de 19 años que va presa y es acosada. La historia trata de Piper y su experiencia en la prisión de mujeres -conteste victoriosa- y ya acepte mi papel

Para ese momento mi mente ya estaba más que sobre calentada y mi orgullo ni se lo imaginan. Con tal de hacerle la contra a Ruby era capas de todo.

- Bien, si sabes que hay escenas de besos con mujeres no? -me miro aun intentando que salga huyendo-

- Si y que con eso? -la miro essperando-

- Creí que eras homofóbica -elevo una ceja- al menos eso demostraste

- No fue lo que quise decir -dije casi en un susurro-

- Bien, pues bienvenida y espero que tengamos un trabajo en paz -sonrió-

- Lo mismo digo -Sonreí de lado-

El resto del viaje en barco hasta la isla transcurrió normal. Íbamos ensayando mi entrada a la prisión y la primera vez que Stella defiende a Sandy.

Llegamos y nos vistieron y peinaron de acuerdo al personaje, para decir verdad Ruby se veía muy sexy con la vestimenta de reclusa.

Varias veces cruzamos miradas pero yo la esquive.

Ensayamos la escena varias veces hasta que anochecio, la escena debía ser grabada de noche ya que iban a pasar mi arresto y mi entrada a la presión.

Estaba todo listo y comenzamos a grabar la escena.

Escena 1:

Vi mi ropa ensangrentada y caí de lo que había hecho, había asesinado dos personas por defender a mi madre. Estaba cansada de que la maltraten, los vecinos habían llamado a la policía por los gritos.

-  Corre Sandy! Huye! -grito mi madre llorando cuando vio a los  policias-

- Mire a mi madre. Sin reaccionar, la puerta se abrió y ahí me heche a correr, una de las policías fue más rápida que yo y se tiro sobre mi, las dos caímos al piso y me aprendió, puso mis brazos hacia atrás y me esposó. Suspire y no me resistí- Serás llevada a la comisaria a declarar y luego quedarás detenida -dijo una de las oficiales- Pueden llevarme directo a prisión y condenarme, yo he asesinado a esos hombres -confesé sin más, ya daba lo mismo. Me llevaron ante una jueza donde le comunicaron lo que yo confesé y me condenaron, de ahí fui trasladada directo a la prisión, mi vestimenta ya era como la de las demás reclusas. Iba escoltada por dos oficiales, esposada bajo la luz de la luna y el cielo estrellado, las puertas del penal se abrieron e ingresamos-

- Vaya vaya -silbaban algunas-

- Chicas tenemos carne nueva -dijo otra-

- Miren lo que tenemos aquí -dijo otra-

- Ten cuidado niña bonita - soltó otra y rió-

-se oían bastantes silbidos-

- Silencio señoritas! -exclamo una de las oficiales-

Me llevaron hasta el sector b, pabellón 4. Entre y soltaron mis esposas y me dejaron allí. Me mostraron donde seria mi "celda" ya que ahí no había rejas.