Time After Time.

Harry.

Annie y yo nos estamos preparando para ir a la boda de una de sus primas.

Mejor dicho, Annie lleva dos horas frente al espejo acomodando su escote, ese escote, que llevará contra mi voluntad.

—¿Podemos irnos ya?—le preguntó luego de un rato.

Me mira por el espejo y me hace una mueca.

Se ve tan hermosa.

Sin poder evitarlo me levanto y la tomo en mis brazos.

—Amor, estás arruinando mi vestido.

—No me interesa...—aseguro y comienzo a besar su cuello—No quiero ir a esa boda, por favor.

Annie me empuja lejos de ella y se acomoda el vestido frente al espejo.

—Puedes quedarte aquí si quieres—dice y se esparce el perfume por el cuello—Puedes visitar a esa puta, ¿Cómo se llama?

Mía, ella acaba de llamar a Mia puta.

Exploto.

—Me suena a una genial idea—le contesto y beso su frente—Nos vemos mañana.

Escucho como grita mi nombre conforme me acerco a la salida y cuando subo a mi auto ella está furiosa en su porche.

Mía no es ninguna puta.