Can't help

X

El pequeño Lou termino su día en la universidad, había sido pesada la jornada.

Busco en su mochila, tomó sus llaves para así entrar a su loft. Extrañaba a Harry.

Entrando, desplomándose en el sofá, aún escuchando call me de Blondie.

Revisando su celular, buscando la conversación con su novio para preguntarle que cuando volvería. Lo extrañaba. Y él planeaba una sorpresa de bienvenida, solo entre ellos. Romántico.

Escucho un fuerte ruido dentro del loft, inmediatamente Louis se arranco sus audífonos un tanto asustado, creía ser el único en casa.

Reacciona Louis. 

Tomo su celular, se acercó a la cocina buscando alguna herramienta para así defenderse en caso de.

"¡La jodiste Styles!" escucho Louis aquel grito.

Le tomo un momento calmarse, todo su ánimo cambio de un momento a otro.

"Solo es Harry"

Harry.

Louis no podía estar más feliz de ello, lanzó aquellas cosas en la barra, para así dirigirse rápidamente hacia su novio.

"Amor" habló primero Louis, lanzándose a los brazos, esperando un reconfortante abrazo.

Es lo único que necesitaba.

.🌈.

En pocas palabras. El sabía que lo había cagado.

No podía dejar de imaginarse a su pequeño novio llorando, preguntando por qué.

Se odiaba.

En aquel viaje de trabajo se había dejado guiar por sus impulsos. No una vez, si no tres veces.

Y después de lo sucedido, todavía tenía la cara para hablar con Louis, se mentía así mismo. Pero a el pequeño nunca, lo amaba.

Había adelantado su llegada a Londres.

Se encontraba empacando, una vez más. Estaba furioso consigo mismo, una vez más.

Aventó la maleta a un rincón de la habitación.

Suspiro.

"¡La jodiste Styles!"  y grito.

Tomo asiento en la orilla de la cama, era inevitable que las lágrimas comenzarán a salir.

"Amor"

Lo miro, allí estaba su pequeño, hermoso con sus mejillas rojas y sus ojos brillantes.

Este saltando a su regazo comenzando a chillar de alegría. Repartía besos por todo su rostro. Se sentía tan real.

Louis tomo su rostro entre sus manos. Harry sonrío, por supuesto que había extrañado a su pequeño, por supuesto que lo amaba.

Es por eso que no lo merecía.

Y lo beso.

Louis estaba feliz, reía entre el beso, podía sentir su sonrisa.

"Te amo Louis, nunca lo dudes" dijo al apartarse.

Sobre sus piernas se encontraba su pequeño angel.

Con uno de sus suaves y largos suéteres esponjosos, sus jeans negros y sus vans en colores pasteles. Su dulce aroma y sus mejillas coloridas. Nunca podría olvidarlo.

Ambos se miraban con detenimiento.

Louis dio el primer paso. Se abalanzó una vez más hacia su amado, tomando sus labios en un feroz beso. Este comenzó a bajar sus manos así desabrochando la camisa del mayor, repartiendo besos desde el cuello hasta su pecho.

"Louis, no" susurró Harry.

Parando a Louis suavemente.

Él lo aprovechó. Comenzando a quitarse sus jeans.

"Que pasa amor, acaso no extrañaste a tu gatito" mencionó inocentemente el menor.

Era su debilidad.

"Basta Louis" habló seriamente Harry, evitando así mirarlo.

El pequeño se quedó plasmado, Harry no usaba aquel tono frecuentemente.

Se acercó una vez más a sus piernas, tomando así el rostro de Harry entre sus manos, mirando así su ceño fruncido y sus ojos llorosos.

"Harry, amor, que ha pasado" preguntó inocentemente.

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