Mala Reputación

Capítulo 1

Su nombre es Adriana, tiene 22 años de edad, estudia Diseño en la universidad UNIDDDD, (Universidad De Desarrollo De Diseño) donde nadie la conoce. Ella es callada pues no habla con ningunos de sus compañeros, pero si algún chico le invita a salir donde sea, ella va con él sin analizarlo. Trabaja de camarera en un bar, de 6:30.PM a 12:00.AM donde siempre llega tarde por las salidas con los chicos, nunca dice que no a nada, pero nunca espera nada de ninguno, no tiene amigas, vive en la soledad, nunca sonríe, ella siempre hace lo que tiene que hacer sin preguntar, su tono de voz es el mismo siempre, no levanta la voz, no susurra, solo habla lo que tiene que hablar y calla.

Los hombres del bar la tratan como cualquiera, le dicen baila para mi, le dan dinero y ella lo hace. Vive con su tía paterna y ella necesita dinero  para pagar sus estudios. Cuando cierran el bar casi siempre ella se va con alguno de los hombres que allí van a embriagarse, la mayoría de veces es a tener sexo.

Llega a su casa, abre la puerta, su tía siempre está dormida, se ducha, se pone la ropa de dormir, se acuesta, llora un poco y se duerme.

Al día siguiente despierta y vuelve a tener la misma rutina, va a la universidad. Caminando solitaria por el pasillo, todos la miran pero ella no mira a nadie, con sus cuadernos en los brazos toda tímida y vergonzosa. Escuchando los susurros de los demás hablando de ella en voz baja.

A la salida de la universidad un chico que va caminado en la calle la ve y se le queda mirando, ella lo mira con un lágrima en la mejilla, y él sorprendido se le acerca y le pregunta: ¿le pasa algo joven? Ella no le responde y acelera el paso. El se queda parado mirándola alejarse.

Llega al bar donde trabaja y se encierra en el baño llorando y diciendo así misma: yo elegí está vida, por terca y por no valorarme a mi misma, merezco esto. Su superior le toca la puerta y le grita: tiene que venir a atender los clientes pero ya, ella sale del baño, se seca la cara y toma los pedidos de los clientes. Unos de los cliente la ven y le dicen: que ricas piernas, tienes un buen trasero, quiero ver que sabes hacer. Ella no lo mira y lo ignora. Pasó la noche entera pensativa, se le olvidaron unos que otros pedidos y su jefe le llamó a la atención y le dijo: tomate el resto de la noche libre, ve y descansa, ella le contesto: esta bien, y Se marchó a su casa. Cuando llegó a casa se bañó, se puso su pijama y se durmió inmediatamente.

Amaneció, era sábado ella se despierta y decide ir a comprar unos materiales para una clase universidad, de camino a la tienda se detiene en una cafetería a desayunar, pide una taza te te y un sándwich de jamón, un joven a su lado pide lo mismo, cuando ella voltea a ver es el mismo chico del otro día. La ve y le sonríe, ella lo ve y baja la cabeza, él con cara de curiosidad le dice: no me respondiste el otro dia, se que no conoces, permíteme  presentarme, mi nombre es Max, ella lo ve y le responde: mi nombre es Adriana  y disculpa no estoy en mis mejores momentos. Le trajeron su té y su sándwich lo pago, lo tomó y se fue. Paso por la tienda y compró los materiales que le hacían falta y volvió a casa, dirigiéndose a casa se encuentra con uno de los hombres que ha estado con ella, la ve y le dice: dime hermosa ¿cuando me darás más de eso? Ella se enoja y le responde: nunca jamás perro, el hombre se enoja y la toma por un brazo y la forza a entrar al su vehiculo, pero ella forcejea para no entrar, ella gritando ayuda!! Ayuda!! Ve un auto color blanco que se detiene, y de él sale el chico llamado Max, rápidamente le cae a puñetazos al hombre que la estaba forzando a entrar a su vehículo, le dio tan fuerte que el hombre cayó desmayado al suelo y Max le pregunta a Adriana: ¿ estás bien? Ella le contesta: sí muchísimas gracias y lo abraza. El le ofrece llevarla a su casa y ella un poco tímida se sube al automóvil de Max y le va explicando dónde ella vive, en el camino él va preguntándole a qué se dedica pero ella no le detalla muchas cosas de su vida, le dijo: que esta diseño, que trabaja en un bar de camarera y que vive con su tía únicamente, cuando llegan a la casa de ella y le da las gracias y se despide, el le responde: de nada estoy para servirte, espera a que ella entra y se va.

Al día siguiente, domingo le toca trabajar medio turno, anda algo tímida porque tiene miedo que le aparezca nuevamente el hombre que la estaba forcejeando, ya en el bar mucho hombres ebrios quieren con ella, pero ella se niega, algunas de sus compañeras le preguntan: ¿ qué te pasa Adriana? No eres asi, y ella les responde: no me siento bien. Se va a su casa y se acuesta llorando, se siente un juguete, todos los hombres la quieren para lo mismo, ella no tiene esperanza de encontrar  un hombre diferente.

El lunes se levanta temprano prepara sus cosas y va a la universidad, se repite la historia en el pasillo, todos se quedan viéndole, y ella sigue caminado llena de vergüenza, en clases el profesor hace una pregunta,  ella es la primera en levantar la mano, el profesor le da la respuesta y con timidez responde correctamente, Todos se quedan en silencio como que la muda hablo. Saliendo de la universidad se dirige a una cafetería a comer algo, pide un café y galletas de avena, se acercan dos tipos murmurando: esa no es la zorra del bar aquel. Ella se le cae la mirada al suelo se para y se va, mientras camina va pensando: ya no puedo exigir otra cosa, yo elegí esto, tengo que aceptarlo.