Reina del inframundo

Capítulo 21😈

Meses después...

Hoy era el cumpleaños de mi novio y como ya llevamos más de medio año saliendo quería darle una sorpresa aparte del regalo que le compre( ya tú sabe 😏) así que esa mañana fui a la cabaña que me regaló mi hermosa familia en el bosque. La decore "románticamente" lo mejor que pude. Ya sabéis que no me gusta lo romántico. Puse luz tenue y pétalos de rosa rojos por allí y por allá. Ahora que lo pienso esto lo debería hacer un chico pero bah. La habitación donde íbamos a estar la mayor parte de la noche la decore con velas y pétalos aunque no se porque por qué eso iba a ser de todo menos romántico. Deje un conjunto para después en el baño.

Una vez ya todo listo me fui a casa para prepararme para Kyle. Me fui a casa y llame a Cam para que me ayudara.
-Vete a duchar y después te maquillo- dijo deprisa.
Me di una ducha relajante y salí con un albornoz y una toalla en el pelo.
Cam empezó a maquillarme sencillo con un poco de base,rímel , raya y pinta labios. Me seco el pelo y me hizo unas ondas en las puntas.
-Corre quedan 20 min para que venga Kyle!- me puse el vestido rápido y quedé de muerte.

Kyle ahora estaba llegando de estar en un bar con los chicos. Les avisé de que no lo traigan borracho. Tocaron al timbre y fui a abrir con la atenta mirada de Cam. Abri la puerta y este me vio confundido.
-Tu y yo nos vamos- lo tome de la muñeca y lo metí en el coche.
-Te ves guapa- dijo haciendo que lo mire- por cierto a dónde vamos?- preguntó confundido.
-A celebrar tu cumpleaños-le dije sonriendo.
El me sonrió de vuelta y después de 30 minutos conduciendo aparque en frente de la cabaña.
-Vamos- le lleve a dentro y se quedo con la boca abierta.
-Tu has hecho esto?- preguntó. Yo asentí- Gracias- me abrazo fuerte y después me besó dulcemente.
-Vamos a comer- le lleve a la mesa y tuvimos una cena bastante tranquila. Era hora de darle su regalo.
-Tengo algo para ti- le dije sonriendo. Saque la caja y se la di.

Le he regalado un álbum de fotos nuestras y de sus amigos.
-Muchas gracias- dijo mientras me abrazaba.Ahora tenía que ver cómo lo llevaba arriba mientras me cambiaba.
-Arriba hay otra sorpresa ve y ahora voy yo- le dije para empujarlo por las escaleras.
No sé cómo pero me cambie a la velocidad de la luz.

Más nerviosa no podía estar, iba a hacerlo con él por primera vez.

Cuando subí estaba por entrar a mi habitación. Se quedó con los ojos como platos cuando lo vio. Entro y yo me acerqué al marco de la puerta y me apoye en este con un brazo encima de la cabeza y el otro en la cintura. El todavía estaba de espaldas así que no me había visto.
-Te gusta?- le pregunte , sin embargo no se giró a verme.
-Lo hiciste tú?- me preguntó.
-Quien más iba a hacerlo?- le dije divertida.
-Estas segura de esto?- preguntó indeciso girando un poco la cabeza pero aún sin verme.
-Tu crees que si no estuviera segura estaría así vestida?- le dije con una sonrisa seductora. Este por fin se volteó y me observó de pies a cabeza escaneando cada milímetro de mi cuerpo. Creo que hasta hechaba baba. Le hice una seña con el dedo incitándolo a venir hacia mi. Este vino sin rechistar.
-Te ves tremendamente sexy así vestida. No sé si podré hacerlo romántico y suave- me susurro en los labios. Me acerqué a su oído y le susurré con voz provocativa:
-Quien dice que tengas que ser suave?- ese fue el detonante para que me estrelle contra la pared, ponga mis mano arriba de mi cabeza y me beso tan apasionadamente que solté un pequeño gemido. El lo oyó y me cargó haciendo que envuelva mis piernas en sus caderas. Bajo sus manos a mi cintura dejando mis manos libres las cuales puse en su cuello tirando un poco de su pelo. Empecé a moverme sobre su pene notando como este se ponía duro al instante. El bajó sus manos a mi trasero y lo apretó haciéndome gemir lo que el aprovechó para explorar mi boca con su lengua. Me cogió mejor y me llevó a la cama sin dejar de besarnos. Empezó quitando las medias y a lo que venían enganchadas. Sobaba mis piernas de norte a sur con sus manos. Las subió hasta el broche del sujetador y me miró como preguntándome si podía hacerlo. Yo lo bese y él lo tomo como un sí. Separándose de mi dijo:
-Desde ese día en tu habitación cuando entre sin querer y te vi semidesnuda quise hacer esto-
-Son todos tuyos- Me lo desabrochó y empezó a masajear mis pechos lentamente mientras me besaba. Sus besos bajaron por mi mandíbula a mi cuello y después a mi clavícula, bajó hasta mis pechos y los besó ,chupó y mordió. Yo solo soltaba gemidos y él siguió bajando sin dejar mis pechos. Beso mi vientre y siguió bajando hasta que pudo morder el borde de mi braga como tortura. Volvió a besarme y yo di la vuelta. Le bese el cuello, mandíbula y pecho bajando por sus bien marcados abdominales y le quite la camiseta y los pantalones dejándome ver su gran "amiguito". Volví a besar su pecho y baje hasta sus bóxers los cuales baje lentamente con los dientes y ayudándome de las manos. Saque un condón de un cajón y se lo puse lentamente torturándole. Me dio la vuelta y me besó mientras desesperado quitaba mis bragas. Puso su pene en mi entrada y antes de que lo metiera me puse encima de él tomando las riendas del asunto. Me deslicé hacia abajo lento y sin prisa hasta que no pudo más con la tortura y me cogio de las caderas para empujarme fuerte hacia abajo haciendo que los dos gimiéramos. Se volvió a poner encima de mí y me empezó a penetrar duro haciendo que gimiera fuerte al igual que él. Esto era el paraíso, sentir este placer es lo mejor. Después de varias estocadas me cogio y me puso contra la pared de espaldas, me tocaba los pechos y me mordia el cuello, mi punto debil. no podía parar  de gemir, y cuando creia que no podia darme mas placer, me llevó de nuevo a la cama e intntó ponerme en cuatro, pepro no le dejé poniendome yo encima de el moviendome como el angel de la lujuria que soy. De esta manera lo sentía mucho más profundo, mis piernas empezaron a temblar , casi no podía respierar y aun asi era una de la mejores sensaciones del mundo. Nos corrimos en cuestión de seundos. Ambos estábamos agitados y temblando por el arrasador orgasmo que habiamos tenido juntos, me salí de el y me tumbé al lado intentando normalizar mi respiración.
-El mejor sexo de mi vida, una pena que haya acabado- dijo cuando ya habíamos controlado nuestra respiración un poco.
-Quien dijo que esto ha terminado? Nos queda toda la noche y una caja de condones llena- me miró asombrado.

-Dios, te amo- dijo poniéndose encima de mi para repetir lo que acababa de pasar.