Ignoró su llanto de nuevo...
Christian:
Los recuerdos llevan atormentándome desde el momento en el que ella se fue del hospital.
Intento no derrumbarme,pero es imposible...
Me enamoré de ella.
Hace varios años,a pesar de todo lo que hice en el pasado, me preguntaba lo siguiente:
¿Cómo debe de sentirse cuando estás solo y frío por dentro?
Y aquí estoy,andando por las calles de Madrid sin rumbo...bajo la lluvia.
No siento nada,ni el frío,ni los coches y autobuses pasando,nada.
Solo siento un nudo en la garganta y cierto asco hacia mí mismo.No debí mentirle...¿pero qué iba a hacer? He sido capaz de hacer cosas repugnantes,pero en cambio no pude hacer las cosas bien desde el principio.
Cobarde.
Mi subconsciente no para de repetirme esa palabra y lo hace con razón.
La he llamado varias veces y ella no ha respondido,he estado justo delante de la puerta de su casa a punto de tocar y me he echado atrás,porque sabía que ambos nos íbamos a romper más.
Me siento en un banco porque estoy harto de andar y miro hacia mis manos sin saber que hacer.Me quedo pensando durante varios minutos,mientras siento como las gotas de lluvia corren por mi cara y entierro la cara entre mis manos mientras suspiro.Un toque en el hombro me saca de mis pensamientos y antes de girarme pido que sea ella,pero no lo es,ni lo será...
— Disculpe,¿está bien? — escucho una voz a mis espaldas y me giro.
— S-sí. — digo intentando sonar lo más convincente que puedo,me da una sonrisa de boca cerrada y desaparece de mi vista.
Siento como el bolsillo de mi pantalón vibra y meto la mano en él sacando el móvil,es un mensaje SMS y lo leo .
Hey Chris,te apetecería echarnos un call of duty y unas cervezas en mi casa como en los viejos tiempos. ¿Estás bien? Hace meses que no hablamos.
- Vlad.
Sonrío sin ganas,en el fondo no quiero.Pero seguro que Vlad me ayuda a despejarme durante un rato.Me levanto y miro al mi alrededor para ver dónde me encuentro y me percato de que estoy como a unos diez minutos de mi casa.
Al llegar a casa me cambio de ropa y ya estoy de camino a la casa de Vlad.Al llegar posiciono mis nudillos en la fría madera de la puerta y toco cuatro veces.
— Estás vivo eh,¿cabroncete? — dice mientras me da un codazo suave en las costillas mientras se ríe y yo le imito.
Pasamos y todo está mejor de lo que me esperaba,llego a pasar hace un año y todo esto hubiera sido un desastre.
— Ponte cómodo,vengo enseguida.
Me siento en el sofá y miro mis notificaciones mientras que él viene y en menos de lo que me espero,pone dos cervezas y un bote de patatas Pringles en la mesita que está delante del sofá.Enciende la televisión y enciende la ps4.
— Que paliza te voy a dar. — dice mientras me entrega el mando y niego con la cabeza mientras me río.
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