Capitulo I

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Sabes, algún día voy a encontrar el amor –dijo ella mirando sus libros-

-el amor no existe, cuantas veces te lo he dicho! –dijo el casando de las falsas ilusiones de su mejor amiga-

-el hecho de que tú seas un perro degenerado que anda con 5 mujeres a la semana y creo que me quedo corta –hace una ligera pausa- no quiere decir que no exista el amor, créeme algún día te enamoraras

-ya estas empezando a hablar vacuencias Emily

-ve lo que te digo Justin  piensa lo que quieras pero algún día tendrá que ocurrir –dice ella levantándose de la mesa de la cafetería recogiendo sus cosas-  

-como la muerte –dijo molestándola-

- aunque lo digas para molestarme –dijo ella mirándolo con una sonrisa- tienes razón como la muerte alguna día va a llegar, algún día igual te enamoraras – ella lo miro con una sonrisa de triunfo y el con una de fastidio, odiaba que siempre ella por alguna razón terminara tendiendo la razón- chao justincito me tengo que ir a clase –dijo dándole un beso en la mejilla, ella sabía que el odiaba eso pero aun así lo hacía, así era su amistad entre cariño y odio- espero que tú también vayas a la tuya –dijo y se fue.

Al irse ella, el hizo como siempre mirarla por atrás viendo cómo se alejaba meneando sus caderas de un lado al otro, dentro de él sabía que amaría estar con una mujer como ella pero a la vez odiarlo, Emily era la única chica con la cual no se metería en toda la universidad, primero raramente apreciaba mucho su amistad, segundo era una chica o más bien la única en la cual el la consideraba superior a él, tercero ella  nunca se fijaría en él y cuatro y ultimo aunque raro el la quería mucho como para lastimarla con sus amoríos y engaños.

-Robinson a clase! –lo asusto aquel grito, era el Directo Johnson otra vez molestándolo, desde que la mama de Justin lo enamoro le saco plata hasta mas no poder lo voto como se vota la basura todos los días sin más ni más, le hacia la vida infeliz en la universidad, aunque él lo niegue hasta su muerte-

-ya voy, no puedo terminar de comer en paz

-tuvo una hora y media para almorzar ahora por favor vaya ya a clase –dijo con un tono alto-

-Justin se levantó de la silla se dio la vuelta y lo miro- Primero, yo no tengo la culpa que un vejete como usted no satisfaga a una mujer porque estoy seguro que eso fue lo que paso con mi mama y a causa las mujeres lo dejan y por eso anda mal humorado y le jode la vida a todo el mundo; Segundo, faltan 10 minutos para que comiencen la próxima sección de clases; tercero,  no debería estar en su casa porque tengo entendido que está de vacaciones, porque no mueve su trasero hasta su casa y nos deja la vida en paz! –el director se quedó callado ante sus palabras, estaba buscando las palabras para responder a Justin pero el sabía que todo lo que había dicho era verdad, desgraciadamente-

- De gracias que ahora mismo no tengo tiempo para lidiar con jóvenes como usted o si no ya estaría expulsado –dio la vuelta y se fue-

Y así era Justin, algunos decían que era un “Joven Problema” otros “El virus de cualquier lugar” pero en realidad lo era, pero todo su comportamiento venia de un pasado que cualquier joven no lo hubiese aguantado. Desde que nació presencio las fuertes peleas de sus padres, de que su padre le pegara todas las noches a su madre, de estar huyendo  de policías, bandas, asesinos y muchos más, ya que su padre era el gran Robinson, William Robinson años atrás no se podía mencionar ese nombre porque muchos temblaban, Robinson era el más grande asesino conocido no solo en Estados Unidos si no en todo el mundo y no era por exagerar así lo era, por lo cual era el más buscado así que huir era parte de la rutina de su vida, hasta que en un 24 diciembre de 1964 entraron a su casa tres hombres armados y de 12 tiros el gran William Robinson dejo de existir mientras justin de tan solo 10 años debajo de su cama con su madre lo presencio todo y desde ese día odia la navidad. Por otro lado desde ese tormentoso día Justin ha visto hombres entrar y salir de su casa viendo como su madre se prostituía para poder pagar todos sus gastos, pero bueno muchos pensaran que bueno al menos es una “Buena madre” por buscar de alguna forma el sustento, pero no, el hecho era que maltrataba a Justin todos los días, lo intento vender varias veces, le daba drogas, alcohol y cigarrillos y todo esto lo soporto por 9 años más hasta que se harto consiguió trabajo y no dejo que su madre la maltratara más .

Nunca me podria enamorar de ella. JB. En ediccion.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora