Capitulo VI

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-Despues primero vamos a curarte

-Mujer ven aquí y dame mi beso!

Dijo el ya corriendo detrás de ella, hasta que la alcanzo y la beso. Justin nunca se imagino que una mujer lo hiciera sentir tan débil, tan vulnerable y tan amando a la vez y eso es lo que hacia Emily, simplemente Emily era su angel, su todo.

-Aaaaaa Basta déjame! –decía Justin cuando Emily lo estaba curando-

-Deja de ser un bebe y deja curarte! –dijo ella poniendo un algodón en sus heridas-.

-Pero se me mas delicada mujer!

-Esta bien solo falta un poquito –dijo ella concentrándose en las heridas de Justin, al terminar subió su  mirada y se encontró con la de Justin- Eres un bebe, no se como has podido aguantar tantas heridas

-Lo se, soy algo cobarde al momento de curarme –dijo el mirándola para luego sonreírle-

- Esto es muy raro no? –dijo ella levantándose poniendo el algodón en su lugar-

-Que cosa?

- Esto –dijo ella simplemente, el la miro sin entender- el que seamos novios

-No me parece raro, solo somos dos personas que se quieren mucho y no aguatan estar mas de amigos-

Ella se rio por su explicación- Lo se, pero es que por Dios eres JUSTIN! –dijo ella y se acostó en la cama de Justin-.

-Y eso es malo?

-No, no lo es –Emily le sonrió-

-Entonces –dijo el sentándose al lado de ella- me dijiste que gustabas de mi, cierto? –Emily solo asintió con una gesto- entonces si gustabas de mi, porque se te hace raro?

-Porque nunca me imagine que tu gustabas de mi

-Yo tampoco –Emily lo miro raro- en el sentido en que siempre te sentí algo prohibida, sentí como si fueras algo inalcanzable para mi –ella lo miro y se puso a su altura, el solo la miro a los ojos con una sonrisa- eres mucho para mi Emily

Ella lo miro con ternura, le encantaba este Justin el cual había ocultado por mucho tiempo, se acerco a el y lo beso.

-Podría acostumbrarme a estos besos –dijo Justin con una sonrisa volviéndola a besar-.

Las semanas pasaron y todo iba de maravilla, su relacion era rara porque mas era por lo que peleaban que lo que hablaban pero siempre terminaban en risas.

-Tengo algo que contarte –le dijo Valentina a Emily caminando hacia la universidad-

-Que paso?

-Ayer salí con alguien –dijo ella de pronto y Emily se detuvo mirándola –porque te detienes?

-Ayer saliste con alguien –dijo ella entusiasmada-

-Si que tiene de malo? –Valentina dijo sin entender-

-La apuesta! –grito Emily –no me digas que no te acuerdas Vale

-No me digas que me vas a cobrar la apuesta

-Claro que si apuesta es apuesta

-Pero si ya ni siquiera me acuerdo bien de eso

Nunca me podria enamorar de ella. JB. En ediccion.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora