Alec estaba buscando respuestas, pero sabía que el trabajo era demasiado para él, afortunadamente... Edrian era dedicado y eficiente y podía contar con él.
Cuando llegó a su oficina, Edrian se encontraba ya con varios pergaminos y libros esparcidos en las mesas de trabajo con la vista concentrada en un pergamino, tratando de entender un símbolo.
- ¿Algo en concreto? – Preguntó mientras se acercaba a la mesa viendo a Edrian desde atrás.
- Nada aún. – Dijo sin voltear a ver a Alec concentrado en el símbolo.
- ¿Alguna vez había pasado que un niño con la visión no pareciera demonio y no pareciera nefilim? – preguntó Alec.
- Sabes como yo y como TODO Cazador de Sombras que no – Dijo seco.
- Edrian... ¿Es necesario tu mal humor tan temprano en la mañana?
- Perdona, Alec, esperaré a medio día para hacer gala de un humor que refleja la impresión de la obviedad de tus comentarios.
Alec no dijo nada... Siendo una persona con amor, familia y amigos, podía ser compasivo y hasta entender a un alma tan sola como la de Edrian, que era, a pesar de todo bello y amaba a los niños del instituto.
- Lo lamento Alec, no debo desquitarme contigo. - Dijo seco.
- Déjalo, no pasa nada – respondió sonriendo.
Dos hermosos Nephilims se quedaron suspendidos en un momento turbio, en el que, a pesar de lo que se avecinaba, pudieron, ese instante, acompañar sus corazones con sus ojos teniendo la esperanza de evitar muertes innecesarias.

ESTÁS LEYENDO
Club #SiEdrianHeroe
Fiksi PenggemarReto de Febrero de 2017. Escribir una escena entre Alec y Edrian, Edrien con la personalidad de Raphael Santiago.