Coincidencias.

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-Puedes hacer el favor de calmarte!!!!?!??!- gritaba furibundo Talon mientras aplacaba sus deseos de golpear al ninja inquieto en la habitación, este claramente tenía intenciones de salir a ver qué ocurría con el hombre que atrapó Akali, su cuerpo aún estaba inestable tanto como su equilibrio; caminaba con dificultad tratando de sortear la guardia que lo observaba, sin éxito por supuesto- podrían estar en peligro mientras perdemos el tiempo aquí, si no me ayudarás al, menos no estorbes-

-Aggh! eres intratable verdad? has lo que te de la gana!- caminaba con dificultad fuera de la habitación, un hombre acostumbrado a gozar de todas su extremidades  ahora le hacia frente a su nueva realidad, el lado derecho de su cuerpo era atrapado por la incesante sensación de amortiguamiento, tanto su brazo como su pierna, pero esa ultima en contraposición era la mas dolorosa, tratar de apoyar su cuerpo al caminar era tortuoso, una inclemente llamarada de punzadas en la rodilla incompleta, sin duda la tecmaturgia era de gran utilidad al permitir que sus miembros tuvieran movilidad, pero jamas lograrían igualar al confort de poder manipular algo "netamente tuyo desde el nacimiento"; apoyado contra una pared color beige, inhalaba con dificultad intentando asimilar ese dolor, preguntándose como es que el antiguo portador de este cuerpo lidiaba con esto al vivir, avergonzado de si mismo tras la idea de verse incapaz ante el dolor, liberó su mente analizando los sonidos que provocaba el ninja en el lugar que abandonó hace poco; rebuscaba algo entre los cajones, el suave sonido de la tela posándose en el suelo a gran velocidad; se dispuso a observar a hurtadillas por la puerta entre abierta, encontrando al maestro de sombras improvisar un "maniquí" en su cama para disimular su pronta ausencia.

-Listo! para cuando se de cuenta estaré lejos- 

-Mmmh a mi me parece que deberías formar mejor la cabeza, te alcanzo un trapo?-

-Muchas gracias ! esta bi...- miró sobre su hombro encontrando a Talon tras de si, expectante a sus reacciones- ...... esto no es lo que piensas- el semblante amargo en el rostro de su acompañante se veía intensificando su incomodidad- en serio? por que podría casi jurar que planeabas escapar de tu recuperación- hay que tenerle mucho resentimiento a la vida para estar tan amargado como el noxiano, sin embargo Zed de alguna manera se sentía identificado con el desdén en su accionar- oye enano.. - sentándose al filo de su cama con la mirada gacha y pesadez al hablar - que quieres?- cruzándose de brazos se dedicó a ver el semblante de tristeza y turbación en el contrario, trató de relajarse un poco, no estaban en una buena situación, algo de empatía no le haría daño, con parsimonia acertó a sentarse en el suelo, con las piernas en mariposa viendo fijamente al ninja, prestó atención a sus palabras- pues, no haz sentido a veces que estas haciendo las cosas mal, que todas tus convicciones y lealtades están equivocadas?-

-Mmh tus lealtades son insignificantes, antes de que lo mal interpretes te lo explicaré, tus convicciones independientemente de a quien le juras lealtad, son aquellas que puedes defender con tu vida sin arrepentirte, a diferencia de la segunda que puede cambiar e incluso traicionarte de manera vil; haz lo que consideres que este bien según las circunstancias, protege lo invaluable y no dudes sombra, la debilidad carcome tus inseguridades, para cuando te recobres podría ser demasiado tarde- seguía sin quitar la mirada del contrario, Zed había contagiado a Talon y ahora ambos padecían del mismo mal, la incertidumbre.

-Tal parece que si tienes corazón, noxiano; a propósito de todo- riendo por lo bajo- nunca había visto el rostro del demonio dorado tan cerca, es distinto a como me lo imaginé, ademas a parte de Shen nadie había visto mi rostro, si regresas a tu cuerpo espero no se lo comentes a nadie, porque de ser así de buscaré, te encontraré y llenaré tu cuerpo de shurikens- el ambiente había cambiado, ahora todo estaba mas ameno, se sentía extraño hablar con normalidad en estas circunstancias con el odio de Zed; seguía el hilo rojo en su mente, cerrando los ojos por un instante intentaba alcanzar a su amor, donde podría estar, pensará en él? Quizá ya ni siquiera sea importante, ante todo debía encontrarlo y explicarle la situación, salio de sus pensamientos de golpe al notar las intenciones del ninja carmesí.

Tu Sombra En Mis Pasos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora