En mi cama [SeokSoon] One-Shot

Parte Única

SeokMin se encontraba leyendo cómodamente en el sillón de la estancia de su casa, todo estaba tranquilo hasta que escuchó la que puerta de la entrada era abierta y cerrada que indicaba que su hermano ya había llegado.

Decidió ignorarlo y seguir con su lectura, pero una vez más fue interrumpido por la voz de su hermano.

—SeokMin necesitamos que te quites.

—¿Cómo por qué?—preguntó sin apartar la mirada del libro.

—Por qué SoonYoung y yo tenemos que ensayar.

Seokmin levantó la mirada rápidamente logrando ver a Kwon SoonYoung atrás de su hermano. Estaba igual de hermoso que siempre, con sus ojitos parecidos a los de un tigre mirándolo fijamente y una sonrisa encantadora pintada en la cara.

—Hola SeokMin.

—Hola SoonYoung—saludo de vuelta para después pararse del sillón—El lugar es todo suyo.

—Gracias, pero ya que estás aquí ayudanos a mover los sillones, por favor—ordenó su hermano—SoonYoung tú ve cerrando las cortinas.

SeokMin empezó a recorrer a las esquinas los sillones junto a su hermano. A el realmente no le molestaba que se pusieran a ensayar sus coreografías en su casa, el problema es que a veces le llegaban a gustar más de lo que debería, y es que no importaba que fuera lo que bailarán, el cuerpo de SoonYoung se movía de una forma tan sensual y eso llegaba a provocar bastantes idas al baño departe de SeokMin.

SeokMin vio como SoonYoung estaba sufriendo para cerrar las cortinas, el problema con ellas era que la única forma de que se movieran sin que se atoraran era cerrarlas desde arriba, pero eran demasiado altas, así que SoonYoung se había subido a una de las recargaderas del sillón y aún así se notaba perfectamente que un paso en falso y SoonYoung caería.

Tal y como lo predijo, SoonYoung resbaló y hubiera caído al piso si no fuera porque SeokMin actuó rápido agarrándolo de su cintura. Lo bajó con cuidado y cerró la cortina ganándose una sonrisa departe de SoonYoung creando un rayo de placer que recorrió todo su cuerpo.

—Listo JiHoonie, ¿Falta algo más?

—No, creo que ya podemos empezar—SeokMin estaba a punto de subir a su habitación pero la voz de lo detuvo—SeokMin ¿Te puedes quedar a ver? Necesitamos el visto bueno.

¡Estaba de broma! Realmente parecía que lo hacía a propósito.

SeokMin asintió y se sentó en uno de los sillones, la música comenzó y empezaron a bailar. El pene de SeokMin se empezó a endurecer adentro de sus pantalones mientras veía a SoonYoung bailar, su cuerpo se movía con gracia y sus caderas se meneaban al ritmo de la música, cuanto deseó tenerlas bajo de el mientras hacía a SoonYoung gritar de placer.

Bailaron todavía tres canciones mas y la verdad es que SeokMin ya no podía más, si seguían así no dudaría en abordar a SoonYoung contra la pared de la estancia sin importarle que JiHoon estuviera ahí.

Gracias al cielo, su tortura acabó cuando una llamada al celular de su hermano interrumpió el ensayo, JiHoon se disculpó y corrió a la cocina a contestar la llamada mientras SoonYoung se acercaba a el y se sentaba a su lado.

—¿Y que tal lo hacemos?—preguntó SoonYoung.

—Bastante bien la verdad—SeokMin podía ver como por la frente de SoonYoung caían pequeñas gotas de sudor dándole una de las vistas mas eróticas de la vida, el también quería hacerlo sudar, aunque no precisamente bailando.

—Me alegra, nos estamos esforzando tanto y al parecer nuestros esfuerzos están dando frutos.

SeokMin estaba a punto de contestar pero la voz de su hermano lo interrumpió.