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Entraron en la oscura habitación y Hailee hizo el favor de prender la luz.

Justin aún no podía creerlo, la sexy chica estaba parada justo delante de él a punto de ser follada y no inmuto palabra alguna, ni el mas mínimo quejido.

Ella cogió una silla y obligo a Justin a que se sentara en ella. Justin solo estudiaba cada uno de sus movimientos con atención y en silencio. 

Hailee se aseguro de que la puerta estuviese asegurada y prosiguió con su "travesura"

-Muy bien -suspiro- No solo soy una zorra, soy una zorra con clase así que, anda, dime tu nombre. 

La joven levanto las cejas al ver que no obtuvo respuesta alguna, Justin estaba embobado viendo sus piernas, sus pechos, su trasero, ¡Y qué trasero!

-¿Si sabes que mi rostro esta justo aquí verdad?- Justin levanto la vista y se encontró con su dedo apuntando su bello rostro.

Justin se levanto peligrosamente hacia la chica lentamente a lo que esta retrocedió

-¿Sabes?, que no respondas me parece espeluznante, lo siento bombón tu tiempo termino. Lástima, eres un buen partido.

Hailee ya estaba a punto de salir cuando Justin cierra la puerta de un golpe.

-¡Oye!, ¡Pareces un loco!

Pero a Justin no le importo y la beso, la beso con ferocidad. Hailee no responde al instante pero instintivamente sus labios comienzan a seguir un ritmo, Hailee lo toma de la nuca y profundiza el beso, sus lenguas no piden permiso y ya se están atragantando con ellas. Justin toma su trasero y lo aprieta, Hailee salta y queda enganchada en sus caderas cuando siente un especie de tubo que se agranda y se agranda, sonríe sobre los labios de Justin al sentir que su pene crecía por ella. A pasos cortos llegan a un escritorio donde Justin sienta a la chica.

Se dejan de besar agitados por la falta de aire.

-Papi, dime papi

Hailee moja su diminuta tanga al escuchar esa palabra, Justin solo quiso cumplir su sueño erótico, pero no tiene ni la mas remota idea de lo que acaba de hacer.

Acaba de despertar el lado salvaje de Hailee.

Hailee empuja a Justin y salta del escritorio, lo sienta en la silla y ¡Oh! No saben lo que ronda en su cabeza, hará que Justin sienta verdaderamente lo que es tenerla dura.

-Escucha, nene, aquí y ahora hay dos reglas. Mirar y no tocar, si me tocas pierdes y te quedas sin follar esta vagina que es lo que esta esperando y supongo que tu amigo- dice tocando su pene- también.

Justin reúne fuerzas y no toca a Hailee aunque sea lo que mas desea en ese momento.

Hailee mueve sus caderas de arriba a abajo bailando lentamente, mueve sus hombros a medida que va desabrochando los botones de su camisa, Justin solo se masturba. Ella camina a pasos lentos y rodea la silla para agacharse y lamer su oreja. Termia de rodear lo y se pone en frente nuevamente, Justin por mas que solo contemple la escena esta mas excitado que nunca, no por el baile, no por la lamida, por ella y su cuerpo.

Ella le da la espalda y se comienza a agachar lentamente hasta que Justin puede contemplar la vista, puede ver los dos agujeros que Justin mas anhela.

El lucha por no tocarla pues lo dejara así, mientras que ella se divierte contemplando sus gestos.

Ella mueve sus caderas para sacarse la falda. Y quedarse únicamente en ropa interior y zapatos.

El tiempo corre y Hailee aún lo deja con las ganas, se saca el brasier y le acerca sus grandes pechos a la cara de Justin, mientras que el muerde su labio para no romper las reglas.

Es entonces cuando Hailee saca su tanga y se queda completamente desnuda. Se sienta en el regazo de Justin y comienza a mover su trasero en círculos y después de adelante a atrás, y así sucesivamente. 

Es entonces cuando tocan el timbre de la salida y Hailee esboza una sonrisa, el primer día siempre dura dos horas, ella lo sabia y estaba esperando ese momento para estar "solos".

Ella saca el pantalón de Justin y de sus boxers saca su masculinidad. Ella se emociona al ver el tamaño, era grande, alta y gorda y sus venas le decían que estaba a punto de explotar. 

Hailee abre la boca y lame su polla, ella va de arriba a abajo mientras escucha los jadeos y gemidos de Justin. Coloca su mano delante de su cara y va de arriba a abajo nuevamente.

-Si...- gime Justin. 

Sigue masturbando lo solo con la mano mientras va mas profundo y llega hasta sus pelotas, las captura con su boca y las succiona mientras en su boca hace pequeños círculos con su lengua

Justin gime de placer

-Oh, perra- amaba que la llamaran así, era su apodo, ella sabia que a otras chicas no les gustaba y realmente no lo entendía, para ella, perra, era sinónimo de que lo hacia bien- Dios... me vengo

Rápidamente, Hai pasa su boca de sus pelotas a su pene, saboreo aquel jugo caliente tan delicioso para ella.

Fue entonces cuando el bullerío se apaga de los corredores y Hailee dice

-Bien, termino el juego- Justin se enfureció pues no pudo follarla

-¿De verdad?- dijo sin poder creerlo

-Sip, ya no hay reglas- una sonrisa traviesa se escapo de ella

El Conserje HOT (Justin Bieber)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora